Nuestra mente trabaja así: estamos todo el día pensando una infinidad de cosas, algunas le ponemos miedo, o emoción, alegría o tristeza, de repente nos detenemos a repasar uno de esos pensamientos y le volvemos a poner un sentimiento quizá de miedo, y quizá también lo comentamos con alguien, todo eso surge como un repaso de los que se había registrado y allí entonces se graba y pasa al subconsciente y queda registrado como un concepto. Estos conceptos son lo que refleja nuestra mente hacia fuera y se manifiestan en nuestras vidas como hechos reales.