Muchas
veces al primero que tienes que perdonar es a ti mismo por todas las
cosas que no fueron como hubieras querido que fuesen.
El perdón nos libera de ataduras que nos amargan el alma y enferman el cuerpo.
No significa que estés de acuerdo con lo que pasó, ni que lo apruebes.
Perdonar no significa dejar de darle importancia a lo que sucedió,
ni darle la razón a alguien que te lastimó.
Simplemente significa dejar de lado aquellos pensamientos negativos
que nos causaron dolor o enojo.
El perdón se basa en la aceptación de lo que pasó.
"Perdonar es el valor de los valientes.Solamente aquel que es bastante fuerte para perdonar una ofensa, sabe amar". Gandhi
(DE LA RED)