Pensamiento del jueves 14 de febrero de 2013.
"¿Quién no está convencido de que es deseable ser bueno, honesto, desinteresado, paciente e indulgente? Todos elogian a los que practican estas virtudes, pero ¡cuántas veces sucede que ellos no son ni buenos, ni honestos, ni desinteresados, ni pacientes, ni indulgentes! Y esto no les molesta mucho, no se les ocurre pensar que la verdadera comprensión no debe separarse nunca de la realización. Hacer vibrar todo nuestro ser hasta las células de nuestras manos y de nuestros pies, en consonancia con las verdades espirituales que aceptamos intelectualmente, es la razón de ser de los ejercicios que nuestra enseñanza preconiza practicar todos los días. Debemos hacer descender cada verdad con la que entramos en contacto hasta el plano físico para impregnar todo nuestro ser. La comprensión verdadera, no se realiza solamente a través de las células del cerebro; se hace también mediante las células del corazón, del estómago, de los pulmones, del hígado y de todos nuestros órganos. Sí, para que nuestra comprensión sea completa, todas las células de nuestro cuerpo deben participar. Si las células de los otros órganos no hacen su trabajo correctamente, poco a poco las capacidades del cerebro disminuyen igualmente. "
Omraam Mikhaël Aïvanhov |