
Árbol en Otoño.
Así entristece el árbol deshojado en Otoño,
víctima del viento que sacude sus ramas,
mas firme en la quietud de sentirse desnudo.
Comienzan a vagar las hojas danzantes,
hacia un lugar y hacia otro sin destino,
y ocultas sin amparo descansan a escondidas,
intentando aferrarse con la lluvia a la tierra.
El árbol presiente el invierno que se anuncia.
Así habrá de resisitir hasta la primavera,
enfrentar al viento con sus hojas retoñadas.
Será entonces de un follaje de verde copioso,
gigante empecinado en beberse las nubes.
Crecerá más el árbol convertido en coloso,
taladrarán sus raíces más profundo en la tierra,
más nunca evitará con el vigor de sus fuerzas,
la desnudez de sus ramas en Otoño.
(autor desconocido)
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