Cada mañana el sol nos dio en la cara al despertar, cada palabra que le pronuncié la hacía soñar. No era raro verla en el jardín, corriendo tras de mí, y yo dejándome alcanzar, sin duda, era feliz. Era una buena idea cada cosa sugerida: ver la novela en la televisión, contarnos todo, jugar eternamente el juego limpio de la seducción, y las peleas terminarlas siempre en el sillón. Me va a extrañar al despertar, en sus paseos por el jardín, cuando la tarde llegue a su fin. Me va a extrañar al suspirar, porque el suspiro será por mí, porque el vacío la hará sufrir. Me va a extrañar y sentirá que no habrá vida después de mí, que no se puede vivir así. Me va a extrañar cuando tenga ganas de dormir y acariciar. Al mediodía era una aventura en la cocina, se divertía con mis ocurrencias y reía. Cada caricia le avivaba el fuego a nuestra chimenea, era sencillo pasar el invierno en compañía. Me va a extrañar al despertar, en sus paseos por el jardín, cuando la tarde llegue a su fin. Me va a extrañar al suspirar, porque el suspiro será por mí, porque el vacío la hará sufrir. Me va a extrañar y sentirá que no habrá vida después de mí, que no se puede vivir así. Me va a extrañar cuando el día llegue a su fin, cuando tenga ganas de dormir me va a extrañar...
Hermosa canción que canta Ricardo Montaner, ahora que estuve enferma y que todo indicaba que iba a bandonar esta vida, pensaba en ella, pero gracias a Dios sigo aquí y espero que sea por muchos años.
Aquí les dejo el video por si quieren verlo. Gracias y besos.