La Pincoya habita el mar, con su apariencia adolescente y bonita. Es un espíritu benigno. Cuando una barca de pescadores es atrapada en una tormenta, la que apacigua los ánimos es la Pincoya. Cuando hay problemas lejos de la costa, la que ayuda a encontrar el rumbo es la Pincoya. Cuando alguien naufraga, lo rescata la Pincoya. Acompañada de sus dos hermanos, la Sirena y el Pincoy, se asegura de que los náufragos regresen a sus hogares con vida. Pero a veces, hasta ellos tres llegan tarde. Entonces, toman los cuerpos sin vida y los llevan suavemente hasta el Caleuche, el buque fantasma habitado por los hombres que nunca abandonarán el mar. Las noches de luna llena, son noches de promesa. La Pincoya, vestida de algas, baila en la orilla. Si baila de espaldas al mar, habrá escasez de pesca. Si baila frente al mar, habrá abundancia de peces y mariscos. Y si alguien tiene la suerte de verla bailar, esa persona tendrá magia en su vida.
Publicado por Evangelina Prieto en 19:58
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