Ten el coraje de parecer tonto, porque los verdaderos tontos son aquellos que nunca intentan nada. Ten el coraje de cometer errores, porque pueden enseñarte como nada en el mundo podría.
Ten el coraje de poner manos a la obra. Porque aunque tus acciones conlleven la posibilidad de fracasar. Si nunca haces nada entonces puedes tener la certeza de que fracasarás.
Ten el coraje de vivir cada día a pleno, con entusiasmo y un espíritu generoso. Porque aunque en este mundo los problemas abundan, las oportunidades son muchísimas más.
Ten el coraje de hacer lo que está bien en lugar de lo más fácil o conveniente. Te ganarás el respeto de los demás y, más importante aún, te respetarás tú mismo.
Ten el coraje de reconocer y aceptar las cosas tal cual son. Te pondrá en situación de marcar una verdadera diferencia.
Ten el coraje de amar, de decir lo que piensas, de ser fiel a tus pasiones y de respetar tu curiosidad. Ten el coraje de entregarte, porque todo lo bueno que ofrezcas volverá a ti una y otra vez.
Gabriel Sandler