Los expertos han descubierto un nuevo beneficio de dormir. Según una investigación publicada en la versión online de la revista Nature, reactivar un recuerdo durante el sueño lo fija mejor en la mente.
Tips para un sueño reparador
Descansar bien es un indicativo de que el cuerpo resistirá el cansancio y de que podremos mantener el buen humor durante todo el día. Por tal motivo, ante cualquier problema con nuestra forma de dormir, es mejor consultar a un especialista.
Sobre el dormir y las posturas que adoptamos, el director de la Clínica de Trastornos del Sueño de la UNAM, Reyes Haro Valencia, dio algunas respuestas.
¿Por qué cambiamos de posición al dormir?
El hecho de que nos movamos responde a que despertamos varias veces durante la noche; muchas veces menos de un minuto, pero no las recordamos porque no tenemos conciencia.
Así, cuando se cumple un ciclo de sueño —que dura alrededor de 90 minutos—, despertamos y buscamos un reacomodo en la cama.
“Independientemente de la postura que asumamos para quedarnos dormidos, pasamos por todas las demás. Sólo una persona con problemas para conciliar el sueño cambia más de postura, es ahí donde se ve que su sueño es intranquilo y, por lo tanto, no reparador”, dijo Haro.
¿Existe una postura ideal?
La individualidad de cada quien también se ve reflejada en el dormir, por ello no existe una postura universal que se pueda recomendar.
Para descansar mejor, comenta el médico, “lo que se puede hacer es ver en qué postura despertamos y adoptar la misma para cuando nos vamos a dormir, ya que esa posición fue la que a fin de cuentas encontramos más cómoda”.
¿Es posible cambiar la pose en que normalmente se duerme?
Si en la que se duerme habitualmente ya ha causado algunas molestias, entonces es una buena idea; es difícil pero no imposible. Lo importante es quedarse en la nueva posición y tratar de acostumbrarse.
Existe mucha gente que asegura que no se mueve durante la noche y que tal cual se durmieron, se despertaron, pero esto es mentira.
“No hay forma de que alguien se quede en una sola posición, todos nos movemos de noche. Sólo los que tienen problemas motrices como alguna parálisis o trastornos neurológicos no lo hacen, pero no es recomendable. A quienes los cuidan se les pide que los muevan durante el sueño para evitar lesiones en la piel, de modo que el movimiento nocturno es algo normal y saludable”, apuntó Haro Valencia.
Añadió que el adoptar una u otra postura forma parte de la naturaleza de cada individuo; habla de la preferencia que todos tenemos respecto a dormir de uno u otro modo. Si amanecemos de cierto lado, quiere decir que durante la noche estuvimos buscando llegar a esa postura.
¿Cambia la forma de dormir si se duerme solo o acompañado?
Como cualquier cambio, trae consecuencias; claro, no siempre negativas. Al dormir con alguien, los estímulos que recibimos de la otra persona hacen que por ende nos movamos también.
Esto ocurre porque 60% del tiempo que dormimos los adultos, estamos en sueño ligero, que se caracteriza por percibir los estímulos que están a nuestro alrededor.
Por lo anterior, las posturas al dormir en pareja también se modifican.
Esta etapa de sueño ligero es importante porque sin ella no podríamos atender a eventualidades o situaciones de alerta como el llanto de un bebé, el timbre de la puerta o del teléfono.
La gente que sufre de insomnio se queja de estar despierta en esta etapa y dicen que duermen sólo tres o cuatro horas; no toman de forma subjetiva esta situación común.
Otra etapa es la del descanso físico, o sueño de ondas lentas, en la que el cerebro genera ritmos muy lentos y alargados. La última fase del sueño es a la que se le atribuyen las funciones reparadoras desde el punto de vista mental. Dura en promedio 90 minutos.