Cansados caminos recorridos
escombros derrumbados del ayer
angustias venideras del sendero
y promesas de poesías
que ya no se pueden ver
cuantas se han roto,
cuantas han quedado en olvido
y cuantas de ellas sanar
toda una vida no han podido
enigmas centrífugos de letras
carencias eternas de segmentos
mientras mis puntos
se convierten en demencias
y las comas de la oración
son la espera de los sufrimientos
pero se han evaporado los signos
de exclamación ya no se expresan
ni alegría, ni asombro ni aspereza
de la semántica que es antigua
parecen señales desaparecidas
las expresiones de la interrogación
parecen ya desvanecidas
cuando solo queda la afirmación
y la coyuntura de lo olvidado
con desquicios de mis fragmentos
que ya pueden estar perdidos
y abandonando lo soñado
son contrastes de lo vivido
que se sumergen en palabras
poderosa arma del universo
que tira todas las murallas
como tira al humano y su fuego
palabras que desaparecen,
que quitan el valor, la furia y el miedo
que pueden dar la alegría
como también un gran tormento
parecen ser solo palabras
con sus signos y acentos
aunque una vez se me halla dicho
que se las llevaría el viento
más no creo hoy que eso
pueda llegar a ser cierto
lo que pasa es que se transforman
en acciones, turbulencias
o en claros pensamientos.
¿Y dónde ha quedado la métrica, la rima y la medición? son solo enigmas de una simple multiplicación, división y confusión y yo no hago matemáticas, más bien son pasatiempos de esta loca imaginación.