Padre nuestro que estás en el cielo, Santificado sea tu nombre; Venga a nosotros tu reino. Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; No nos dejes caer en tentación y líbranos del mal...
Querido Joaquín siempre estás en mis oraciones, confío en Dios en que te encuentres sobrellevando tus males y que este verano el clima haya sido benigno contigo. Te quiero mucho.
Gloria