LA MALETA DE LA VIDA
Cuando tu vida empieza, tienes apenas una maleta
pequeña de mano...
A medida que los años van pasando,
el equipaje va aumentando.
Porque existen muchas cosas que recoges en el
camino.
Porque piensas que son importantes.
En un determinado punto del camino comienza
a ser insoportable cargar tantas cosas.
Pesan demasiado...
Entonces puedes escoger permanecer sentado
a la vera del camino,
esperando que alguien te ayude, lo que es difícil,
pues todos los que pasen por allí ya traerán
su propio equipaje;
puedes pasar la vida entera esperando...
O puedes disminuir el peso, eliminando
lo que no te sirva.
Pero... ¿qué tirar?
Empiezas tirando todo para afuera y viendo
lo que tienes dentro:
AMISTAD, AMOR, AMISTAD, AMOR...
¡Bien! Tienes bastante.
Es curioso... ¡no pesa nada!
Mas tienes algo pesado...
Haces un gran esfuerzo para tirar...
La RABIA... ¡cómo pesa!
Empiezas a tirar, tirar,
y aparecen la INCOMPRENSIÓN,
el MIEDO, el PESIMISMO...
En este momento, el DESÁNIMO
casi te empuja adentro de la maleta.
Pero tú empujas para afuera con toda tu fuerza,
y aparece una SONRISA,
que estaba sofocada adentro del equipaje.
Sacas otra sonrisa y otra más,
y entonces sale la FELICIDAD.
Colocas las manos dentro de la maleta
y sacas la TRISTEZA.
Ahora, tienes que dejar la PACIENCIA
dentro de la maleta, pues vas a necesitar
bastante. Procuras entonces dejar también:
FUERZA, ESPERANZA, CORAJE,
ENTUSIASMO, EQUILIBRIO,
RESPONSABILIDAD,
TOLERANCIA, BUEN HUMOR.
Tira la PREOCUPACIÓN también,
o déjala de lado.
Después piensas qué hacer con ella.
Bien, tu equipaje está listo, está para ser
usado de nuevo.
¡Más piensa bien en lo que vas a colocar dentro!
¡Ahora es para ti!
Y no te olvides de hacer esto muchas veces,
pues el camino es
MUY, MUY LARGO.
Anónimo