La fruta de la salud
La naranja es un fruto cítrico que tiene propiedades curativas porque es ácida, y este ácido es depurativo y oxidante, desinfectante y microbicidia (como la mayoría de las frutas cítricas). Una larga lista de enfermedades y acciones favorables son las que hacen que su jugo sea, además de dulce y refrescante, una bebida consentida por el cuerpo. La naranja, el limón y la mandarina son las frutas cítricas con mayor contenido de cal, elemento que forma parte de nuestra sangre y de los huesos. Además, la naranja contiene altos porcentajes de ácido cítrico, magnesio, fósforo y hierro.
Principalmente, la naranja:
• Limpia y tonifica la sangre y todos sus tejidos, músculos y células
• Destruye la grasa y la obesidad, rebaja el vientre, limpia el cutis y hace brillar los ojos.
• Desinfecta la sangre y cura cualquier enfermedad infecciosa como catarros, tos, sífilis, hongos infecciones de la piel, aftas, fiebres (provocadas por infección o toxemia), lesiones con pus, etc.
• Regulariza el ritmo cardiaco y se usa para tratar casos de tumores.
• Despeja el cerebro y ayuda a tener una mente más limpia y sana.
• Cura llagas en la boca y encías.
• Embellece el cabello.
• Ayudan a prevenir y curar el mareo.
• Ayudan a aliviar el dolor de cabeza
Como ayuda terapéutica
• Su ayuda principal y más efectiva es la de depurar el organismo rápidamente. Si tomamos en cuenta que un organismo limpio es sede de la salud y belleza completa, entonces esta propiedad es ya de entrada el mayor de los regalos que nos da la naranja.
• Debido a su contenido en fósforo, se recomienda para todas las personas que sufren intoxicaciones, agotamiento, debilidad nerviosa, insomnio, neurosis o enfermedades relacionadas con el sistema nervioso. A ellas se les recomienda que consuman muchas naranjas.
• Sin embargo, la naranja además es muy favorable y altamente efectiva para tratar casos de esclerosis, anemia, raquitismo, tuberculosis y anemia.
• Se recomienda en casos de estreñimiento, debilidad muscular, osteoporosis, etc.