No dejes que nada ni nadie te dañe los sentimientos ni te robe la fe, porque quien pretende vivir sin sentir y sin creer, no vive, solo existe...
No dejes que nada ni nadie te borre la sonrisa y apague tu mirada con la amargura, porque quien deja de sonreir desde el alma, siente que no hay mañana, solo lo atrapa una eterna noche oscura...
No dejes que nada ni nadie mate tus sueños y te llene de miedos, porque quien no sueña, no crece ni avanza, vive aferrado a las cadenas pesadas del pasado, quejándose del presente y aterrado ante el futuro que viene...
No dejes que nada ni nadie te apague nunca la ilusión, aunque pierdas lo que mas has querido, aunque dejen tu corazón herido, coloca los pedazos de tu vida, los milagros y vuelve a buscar los motivos para seguir y la razón para vivir...
No dejes que la fragilidad humana siembre en tu alma la duda y la desconfianza, no te conviertas en verdugo ni juez de los que fallan, porque asi como mides algún día te medirán con la misma vara...
No dejes nunca de amar, aunque te toque muchas veces llorar, no dejes de confiar, aunque muchos te vayan a fallar, no dejes de caminar, aunque duela tanto el caer, no dejes de luchar por ganar, aunque en la lucha pierdas lo que mas sabes querer, Porque quien ama, confia, camina y lucha, no deja nunca de vivir, aunque muchas veces sienta morir...