Las mujeres de la tribu Mwila son famosas por sus peinados, muy significativos en su cultura. Las mujeres se untan el pelo con una pasta de color rojo, llamada oncula, que se hace con un tipo de piedra roja triturada, una mezcla de aceite, corteza de árbol triturada, estiércol seco de vaca y hierbas. Además adornan su peinado con perlas, conchas de cauri y hasta comida seca. Las mujeres Mwila también son famosas por sus collares y para cada período de su vida le corresponde un tipo específico de collar. Las niñas llevan collares de color rojo fabricados con granos cubiertos de una mezcla especial de tierra. A partir de la adolescencia usan collares de color amarillo llamados Vikeka y hechos con mimbre cubiertos de tierra que mantienen hasta su boda. Nunca se quitan sus collares y duermen con ellos puestos.
Joven Himba danzando, Angola. Eric Lafforgue
La tribu Himba vive en Namibia y en el sur de Angola, y cruzan las fronteras sin ningún tipo de visado. En Angola, la mayoría de ellos viven en zonas remotas, en pequeños poblados lejos de las ciudades, y sin contacto con la civilización.
Los Hamer son una tribu dedicada principalmente al pastoreo y la recolección de miel, que vive en el lado oriental del valle del Omo en el sur de Etiopía. Cada persona tiene tres nombres: el de un ser humano, una cabra y un nombre de vaca. Para dar una idea de la importancia que tiene el ganado para ellos, decir que tienen por lo menos 27 palabras para definir las sutiles variaciones de colores y texturas de un animal. Las chicas Hamer actúan como hombres y aún más, para demostrar que no temen a nada. Durante sus fiestas mas importantes, en la ceremonia del salto del toro donde los jóvenes casaderos eligen pareja, las chicas Hamer para demostrar que son fuertes y ser elegidas, se hacen azotar y se azotan ellas mismas la espalda hasta producirse grandes laceraciones. Cuantas mas cicatrices tienen en la espalda, mayor es su estatus.
Estas cestas gigantes se utilizan para guardar los granos en la tribu Mundimba, en el sur de Angola. La niña se encuentra en el interior para sacar a una cabra que saltó dentro para dormir.
Ana, una joven del poblado Hana. Eric Lafforgue
Ella se llama Ana y vive en Hana, un enclave Mursi en el valle del Omo, en Etiopía. Las escarificaciones se las hizo al cumplir los 14 años y desde el año pasado se ha convertido al cristianismo, por eso lleva la cruz en el cuello. Su pueblo tiene sólo 300 personas y esta foto está tomada justo en la entrada de su casa.
Joven de la tribu Surma, Etiopía. Eric Lafforgue
Una joven de la tribu Surma será hermosa si tiene un gran plato en los labios y si su cuerpo está cubierto de escarificaciones. Las escarificaciones se las hacen con espinas de acacia y a veces con hojas de afeitar. La deformación de los labios son una parte importante de la cultura Surma. El tamaño de los platos en los labios de las mujeres determina la cantidad de ganado que las jóvenes recibirán como dote al casarse. A veces el labio se rompe por la presión y este es un gran problema para la joven, porque los hombres lo consideran tan feo que no será capaz de casarse con nadie de la tribu, aparte de con los ancianos o con personas enfermas.
Guerrero Surma con escarificaciones por todo el cuerpo, Etiopía. Eric Lafforgue
Los hombres, al igual que las mujeres, de la tribu Surma también se hacen escarificaciones en su cuerpo. Siendo un signo de belleza para las mujeres, para los hombres es una representación de las luchas que ha realizado.