Esta es la historia de un artista que, insatisfecho con su trabajo,
un día le dijo a su esposa: "Me voy a ir de viaje.
Necesito encontrar mi inspiración para pintar mi obra maestra".
Viajo por muchos países, vio cosas muy hermosas,
pero no encontraba lo que andaba buscando.
Un día salió a pasear,
detuvo a una novia en el día de su boda y le pregunto:
"Dime, por favor, ¿Qué es para ti lo más hermoso del mundo?".
Ella le contestó con mucha naturalidad: ¡EL AMOR!.
El artista continuo su camino descorazonado.
¿Cómo pintar el AMOR?
Poco tiempo después, encontró a un soldado
que volvía de la guerra;
el artista le preguntó "
¿Qué es la cosa más hermosa del mundo?"
El soldado le contestó sin dudar ¡LA PAZ!.
El artista muy triste se preguntaba
¿Cómo pintar LA PAZ?.
Siguiendo en su búsqueda,
se acerco a un sacerdote que iba camino a su iglesia
y le hizo la misma pregunta.
"Hijo mío, LA VIDA es la cosa más bella del mundo".
El artista que quedo muy decepcionado
¿Cómo podía el pintar un cuadro de la vida?
Casi desesperado, después de tanta indagación frustrada,
volvió para su casa, cansado de cuerpo y de espíritu.
A su llegada, su esposa lo recibió con mucha ternura y calor.
Y el artista encontró EL AMOR de que le había hablado la novia.
Todo en su hogar respiraba tranquilidad y seguridad.
Era LA PAZ de que hablaba el soldado.
Y cuando sus hijos lo besaban vió en los ojos de sus niños...
LA VIDA descrita por el sacerdote.
Feliz, encontró la inspiración que tanto había buscado
fuera de su casa...
...¡SU FAMILIA!.