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De: Karamelito (Mensaje original) |
Enviado: 06/09/2010 07:19 |
Era el concurso del que ve más a lo lejos. Llega el gringo y se pone a ver, y dice: Allá a 150 kilómetros hay un carro marca Subaru de placas vfs1645. Y van y chequean y efectivamente estaba el carro. Después llega el chino y se pone a ver y dice: Allá a 500 kilómetros hay un incendio forestal. Y van y chequean los jueces y efectivamente hay un incendio forestal. Después llega el mexicano y se para y se pone a ver y se pone a ver y se pone a ver y dice: Yo veo unas pompis muy, pero muy lejos, déjenme ver de quien son. En eso se agarra sus pompis y dice, epa son las mias. (o sea que le dio la vuelta al mundo y se vio sus pompis) |
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El papá le dice a Pepito: Pepito, tráeme leche fría. Y va Pepito y le trae leche y su papá le dice: Te pedí que me trajeras leche fría. Sí papá, pero la vaca no cabía en el refrigerador. |
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Iban caminando dos amigos tranquilamente por la calle cuando se encontraron a un árabe, el que les pregunta: ¿Son ustedes herbanos? Y estos contestan: No señor, no somos hermanos. Pero el árabe insiste: A mí no me engañan, ustedes dos son herbanos. Que no señor, nosotros no somos hermanos. ¡Cómo no! Ustedes son herbanos. ¡Cuántas veces le tengo que repetir que no somos hermanos. Pero el árabe insistió hasta que los amigos dicen: ¡Esta bien, sí somos hermanos! Y el árabe contesta. ¡Bues no se baresen! |
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Había una vez un niño tan feo, pero tan feo, que le dijo a la mamá: Mami, ¿usted me quiere? Y ella le dijo: Sí, como amigo. |
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Un loco se acerca a la casa de otro loco, y llama a la puerta, desde adentro dicen: ¡No hay nadie! y él de afuera responde: ¡Pues, menos mal que no he venido! |
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Tiernamente la mujer le dice a su esposo: Oye mi amor, ¿Cuándo me llevas a ver a las Momias de Guanajuato? El día que quieras, pero avísales a tu mamá y a tus tías que vamos, ¡No les vayamos a caer de sorpresa! |
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El hijo le pregunta al padre: Papá, papá, ¿Por qué Tarzán, no usa cuchillo, sierras y ese tipo de cosas en la selva? Y el padre le responde: Es muy obvio hijo, porque tiene a chita. |
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Un borrachito va al velatorio de un amigo para consolar a su familia, cuando se acerca al féretro una mujer le dice: A todos nos tocará. Y el hombre le contesta: ¿Que lo van a repartir? |
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¡Conocí a un hombre maravilloso en un restaurante! ¿Y cómo te fue? Bien y mal ¿Por qué? Porque me acerqué a él, me deslumbró y terminamos pasando la noche juntos en mi departamento. Y eso ¿qué tiene de malo? Que él me contó que era el marido de una amiga mía y allí me vino una angustia insoportable. ¿Y cómo siguió? Voy a terapia para ver si puedo dejar de angustiarme cada vez que él se queda en mi departamento a pasar la noche.
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Un psicólogo como regalo de fin de año les dice a los locos que el que acierte a una pregunta podrá irse a su casa: Pepe, ¿Cuánto es 2+2? Abril Pero Pepe, cómo va a ser 2+2 abril, ¿Tu estas tonto?, contesta tú Juan. 2+2=marzo Pero que manía con los meses, ¡No es marzo! A ver, contesta tú Miguelito. Es muy fácil, 2+2=4 Ole tus huevos Miguelito, diles como has sacado que 2+2=4 Es muy fácil, he dividido abril entre marzo y me ha dado 4.
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Un mendigo va y toca una puerta, sale un señor y le pregunta: ¿Qué quieres? El mendigo le responde: Señor, ¿no tendrá comida que me invite? El señor responde: ¿Le importa que sea de ayer? No, no importa. Entonces, venga mañana. |
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Era un rocanrolero que se va a confesar. Padre, vengo a confesarme, yeah, yeah, yeah. Y el padre le contesta: No te puedo confesar hasta que te cortes el cabello. Pasa un año, dos años, tres años y llega el rocanrolero. Padre vengo a confesarme yeah, yeah, yeah. No hijo, hasta que te quites esos aretes, esas pulseras y todos esos colguijos que traes. Pasan cinco años, seis años y llega otra vez a confesarse. Padre vengo a confesarme, yeah, yeah, yeah. Que no hasta que te vistas como la gente y te quites eso del yeah, yeah, yeah. Pasan cinco, diez, quince años y llega a confesarse. Padre vengo a confesarme. Y el padre le contesta: Hijo mío, dime tus pecados yeah, yeah, yeah. |
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¿Has oido el caso de esa mujer que se libro de 100 kilos de grasa inútil en una sola noche? - No, ¿cómo lo hizo? - Se divorcio. |
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Resulta que para entrar al cielo, había una entrada para hombres y una para mujeres. Por la entrada de hombres, había dos puertas, una con un letrero que decía: "MI MUJER MANDABA EN MI CASA"; y otra con un letrero que decía "YO MANDABA EN MI CASA". Y como es de suponerse, en la primera puerta, había una cantidad enorme de hombres esperando, mientras que en la segunda puerta, no había nadie. Hasta que de repente, al llegar al cielo, uno de los interesados por pasar, tomó la opción de entrar por la segunda puerta. Todos los presentes se sorprendieron muchísimo, y cuchicheaban entre sí, hasta que por fin alguien se animó a ir a preguntarle al recién llegado el por que había elegido esa puerta, a lo que el hombre respondió: - " Es que mi mujer me dijo que me formara aquí". |
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Al insigne gallego le dictaron un número telefonico: - Anota Manolo, tres cuarenta y seis, nueve cero, cuatro siete. El gallego apunto "46 46 46 000000000 7777". |
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¡Oye! y tú ¿por qué cierras las ventanas de tu casa cada vez que tu esposa se pone a practicar sus lecciones de canto? - Para que los vecinos no se crean que la estoy pegando. |
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