La felicidad crea felicidad, la tristeza solo genera tristeza. Tan elemental como saber desde niños que una semilla de mango solo dará mangos. Así mismo, si quiero ser feliz, debo comenzar por mis pensamientos - pensamientos felices me generarán una verdadera felicidad, mientras pensamientos tristes, me harán triste. Tener pensamientos felices no significa forzarse a ser feliz, sino ver todo lo que se ha logrado, hasta donde se ha llegado. Verifica todos los días la calidad de las semillas de tu vida. |