Porque las flores son tan lindas

(Cuento por Jose Luis G. )

Aquella linda princesita se levanto de su camita, que su padre le habia fabricado con gran delicadeza, con madera escogida, de aquella que perfuma las habitaciones por el olor natural y por el que ella misma emana de su propia belleza.

La niña no lograba dormirse, y penso que al escuchar una historia o un cuento, aquellos lindos ojitos negros, lograrian cerrarse para entrar al mundo maravilloso de sus sueños.

Busco un contador de Historias, pero todos estaban dormidos, entonces se le ocurrio llamar a un angelito, y le pidio que le contara un cuento.

El angelito le dijo que se pusiera comoda, y atenta al relato.

La princesita, sonrio, y llena de emociones se prepararo para estar muy atenta .

El angelito comenzo:

Habia una vez una niña tan linda, pero tan linda, que todos en el pueblo deseaban verla, pero ella pensaba que entre mas la vieran, su belleza perderia brillo, y por esa razon, todos los dias, salia hacia los jardines, a esconderse, y se mezclaba entre las flores, las cuales no eran tan bellas.

La gente del pueblo la buscaba con ansias para verla, pero no lograban encontrarla, porque la niña se escondia muy bien.

Cada dia, ella iba a los jardines y en algunas ocasiones se mezclaba entre las hojas, y la gente no lograba verla.

La niña cada dia de volvia mas bella, y siempre que se escondia entre las flores, ellas le copiaban su belleza y su hermosura.

Las flores fueron cambiando, se llenaron de mas color, de mas vida, y de mas brillo. La gente se percato de eso, y mientras buscaban a la princesita, unos a otros comentaban lo agradable que era ver a las flores y sentir sus aromas.

En sus corazones habia alegria, y se dieron cuenta que ahora el deseo de ver a la niña tan linda, estaba satisfecho, porque sentian que al ver a las flores, la veian a ella.

Por fin, la niña pudo caminar tranquila por el pueblo, porque la gente estaba feliz, todos tenian flores en sus casas, y cuando veian a la niña decian:

alli va la niña, tan linda, que hizo que las flores se volvieran mas bellas.

Cuando termino la historia, el angelito vio al rostro de la niña, la cual esta tan feliz, y el le dijo:

esa niña eres tu.

La niña abrazo al angelito, se marcho a la camita con olor a pino, cerro sus ojitos y comenzo a soñar.