La Cancillería rusa afirmó mediante comunicado que Moscú se reserva el derecho a tomar represalias a las sanciones impuestas por Washington y que no tiene la intención de tolerar este chantaje.
"Hemos estado y permaneceremos abiertos a la cooperación constructiva con todos los países, incluyendo a Estados Unidos, en los principios de la igualdad, no injerencia en los asuntos internos y con la consideración real de los intereses de cada uno. No toleraremos el chantaje y nos reservamos el derecho a tomar represalias", reza el comunicado publicado en la página web del Ministerio ruso.
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó que las nuevas sanciones impuestas por Washington a Moscú afectarán al propio Estados Unidos, así como las relaciones bilaterales.
Putin hizo estas declaraciones reunido con periodistas rusos en la capital de Brasil, afirmó que este tipo de sanciones suelen producir el efecto de boomerang.
"Las restricciones impuestas minarán la capacidad competitiva de las compañías energéticas estadounidenses", advirtió el presidente, recordando que Rusia dio autorización a la ExxonMobil para trabajar en su plataforma continental.
También indicó que tarde o temprano habrá que usar otros métodos de solución de problemas internacionales, recalcando que Rusia está abierta para las negociaciones. “Espero que el sentido común y la aspiración a lograr un arreglo con métodos diplomáticos se impongan”, resumió.
Washington extendió sus sanciones a otros altos funcionarios de Rusia y al primer ministro de la autoproclamada República Popular de Donestk.
También impuso sanciones a varias empresas del sector energético, bancos y compañías del complejo militar industrial de Rusia.
El presidente de EEUU, Barack Obama, al anunciar nuevas sanciones señaló que Moscú no contribuye a lograr las distensión en las relaciones con Kiev y no descartó el recrudecimiento de medidas restrictivas.