Festejo - Evo recibió las felicitaciones de sus partidarios al entrar a la sede del gobierno. Todavía no hay datos oficiales, pero nadie duda de los datos conocidos.
El presidente boliviano Evo Morales aseguró ayer que no sólo triunfó con más del 60% de los votos sino que el Movimiento al Socialismo (MAS) alcanzó los dos tercios de las bancas de ambas ramas legislativas. Ante semejante votación, y en respuesta a una pregunta claramente mal intencionada sobre una eventual reforma constitucional que autorice la reelección indefinida de las autoridades, señaló que “por ahora estamos planificando los próximos cinco años de gobierno” y que no ha pensado en un tercer mandato, aunque agregó: "La oposición dijo que no permitirá la reelección de Evo, pero será el pueblo el que opine y decida."
"Los opositores planteaban, 'ojalá que Evo no tenga los dos tercios', pero tenemos los dos tercios. Decían, 'ojalá que haya segunda vuelta', pero ganamos en la primera", dijo durante una conferencia de prensa. Morales admitió que, si bien todavía no hay datos oficiales, "por primera vez en la historia de Bolivia un movimiento antiimperialista y anticapitalista" como el MAS ganó en el departamento oriental de Santa Cruz, un antiguo bastión de la derecha y de los mayores exponentes de la agroindustria, que pregonaban la secesión de esa rica región.
Reiteró, como lo había hecho el domingo de noche ante la multitud que festejaba, que "aquí ganaron un programa de gobierno, las políticas vigentes y la unidad del pueblo". Un programa, precisó, con una propuesta industrialista y orientada a reducir la pobreza, que es el que obtuvo el apoyo de los sectores sociales unidos. Morales mencionó a la Central Obrera Boliviana y a los transportistas, antes en la oposición. El presidente también nombró como parte de esa unidad a la Federación de Juntas Vecinales y a los colegios de ingenieros y abogados, así como "algún sector empresarial".
Morales dijo que, por eso, desde su partido están "muy contentos", reconoció que "no es fácil una nueva reelección" como la alcanzada el domingo y señaló que la victoria "se debe a la lucha de los movimientos sociales y del pueblo boliviano, que supieron reconocer los resultados" de la gestión del MAS. "El pueblo sabe reconocer los resultados, qué importante habrá sido que la política se haya puesto al servicio de la gente, hasta eso hemos cambiado. Cuando se presta servicio al pueblo, el pueblo apoya y la gestión no se desgasta", concluyó.
Ante una pregunta sobre la marcha de las negociaciones con Chile con el objetivo de acabar con el enclaustramiento boliviano y alcanzar una salida soberana al mar, ahora con la presidenta Michelle Bachelet, Evo dijo que "hubo años de dilación", en lo que pareció aludir también al frustrado diálogo con la jefa de Estado chilena en su primer mandato. El presidente reivindicó luego la validez del reclamo marítimo planteado ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, pero dijo que "no descarta mantener un diálogo bilateral" con Bachelet.
Consultado sobre si su llamado a la oposición para trabajar juntos durante el mandato que iniciará el próximo 22 de enero incluye una amnistía para sus contendientes, la mayoría prófugos y protegidos en Estados Unidos, fue tajante y afirmó que "no corresponde la amnistía, que vayan a la justicia", aunque aclaró que Bolivia "no quiere confrontación". «