Que la Navidad nos enseñe a elevar nuestros corazones
A veces nuestros corazones pierden el camino de la paz y la alegría. Es fácil verlos por ahí, cabizbajos, llenos de problemas, perdiendo la fe, perdiendo la esperanza.
A veces nuestros corazones parecen haberse olvidado de Dios. Por eso, cada año, la Navidad regresa a recordarnos el júbilo de ese Dios Niño que vino a dar su vida por nosotros, a recordarnos la humildad de un Jesús que quiso ser hijo de un carpintero y aprender de la vida de los pobres. Por eso lo llenamos todo de luces que parecen pequeñas estrellas: así recordamos a nuestros corazones que ellos no pertenecen a la tierra, sino al Cielo, y que su lugar está allá arriba.
Es Navidad:
Elevemos nuestros ojos hacia la estrella que anuncia la llegada del Mesías, y con nuestras miradas se elevarán también los corazones.
Elevemos al cielo la plegaria de la gratitud y la alegría, y hagamos correr por todas partes la noticia del nacimiento de nuestro salvador.
La Navidad está de nuevo entre nosotros, recordándonos que todos somos hijos del Padre, llamando a nuestros corazones a unirse a los cánticos del cielo.
La Navidad es una lección de humildad, de fe: que su milagro nos enseñe a mantener el corazón levantado hacia el Señor y pedir
Los arreglos con luces se convirtieron en una costumbre muy popular en los Estados Unidos a mitad del siglo XX y ya se hicieron famosos en todo el mundo. Maravíllate con estas hermosas postales de luces navideñas de todo el mundo.
Los arreglos con luces se convirtieron en una costumbre muy popular en los Estados Unidos a mitad del siglo XX y ya se hicieron famosos en todo el mundo. Maravíllate con estas hermosas postales de luces navideñas de todo el mundo.