IMPORTANTE: nota en desarrollo, falta corregir, acomodar, cerrar el texto como a un TODO. Paciencia por favor...
Al igual que la mayoría de los argentinos, venia yo por la vida sin saber quién era Nisman hasta su muerte. Me enteré de su muerte el mismo lunes a la madrugada, cinco minutos después de que lo publicara Clarín. Mi reacción fue muy similar al resto de la población: LO MATÓ EL GOBIERNO K, no hay duda de eso.
Mas luego algo me empezó a hacer ruido. A simple vista, mandar a matar a Nisman parece ser un suicidio político cuyas consecuencias sociales podrían ser mucho peores que la denuncia misma del Fiscal; denuncia cuyo soporte documental no desaparece tras la muerte (como sucedería con el testimonio de un testigo, por ejemplo).
Como ninguno de los involucrados en el caso posee un aura de santidad medianamente defendible, todas las posibilidades caben en éste embrollo. Mi opinión y forma de entender lo que sucede va cambiando en la medida que voy encontrando información y atando cabos que bien pueden ser pompas de jabón en el viento.
A mi entender, y en pocas palabras, las teorías principales que se manejan son:
Todas estas hipótesis serán mas o menos desarrolladas a lo largo del texto para tratar de entender las posibilidades. De buenas a primeras la muerte de Nisman no le conviene a nadie, menos a la continuidad política del modelo K. Éste evento ha dejado tan en claro la "brecha" que existe en la población argentina que da miedo. Una gran porción de la población, principalmente aquella vinculada al sector del agro, cree fehacientemente que el fiscal fue asesinado por orden expresa de Cristina Fernandez de Kirchner sin siquiera molestarse en bucear por la inmensa cantidad de recursos que existen en la Internet, al menos siquiera para confirmar o reforzar su teoría.
La mitad de la población ve en esa mujer diabólica la encarnación misma del mal y por tanto hay que prenderla fuego en la plaza pública. Si uno navega por las redes sociales y presta atención a los comentarios políticos promedio notará tanto de un bando como del otro un grado de violencia tan explícito que asusta en cuanto a lo poco que hemos avanzado en el entendimiento de cómo es la cosa para vivir en sociedad. Para decirlo sin rodeos, muchas personas realmente anhelan el regreso de un gobierno militar o similar que pongan orden a esta "debacle" en la que vivimos.
Ante tal escenario de profunda división social en la Argentina, creo importante adoptar una actitud mental "GRIS" tanto para investigar el caso Nisman, escribir ésta nota y/o finalmente leerla. Básicamente no creerle nada a nadie, no tomar partido, ser un humano libre de prejuicios, con la mente abierta a la información disponible; y no sólo a aquella que encaja en un posible esquema oficialista u opositor en mi cabeza. Rompamos con esa binomia de Buenos Vs. Malos por un momento y consideremos la posibilidad de que ésta historia en verdad sea de Malos Vs. Malos, con nosotros los pobladores (los buenos) en el medio mirando.
Importante aclaración inicial es que las fuentes citadas en el presente texto han sido deliberadamente resumidas para una rápida legibilidad del mismo.
Mas luego algo me empezó a hacer ruido. A simple vista, mandar a matar a Nisman parece ser un suicidio político cuyas consecuencias sociales podrían ser mucho peores que la denuncia misma del Fiscal; denuncia cuyo soporte documental no desaparece tras la muerte (como sucedería con el testimonio de un testigo, por ejemplo).
Como ninguno de los involucrados en el caso posee un aura de santidad medianamente defendible, todas las posibilidades caben en éste embrollo. Mi opinión y forma de entender lo que sucede va cambiando en la medida que voy encontrando información y atando cabos que bien pueden ser pompas de jabón en el viento.
A mi entender, y en pocas palabras, las teorías principales que se manejan son:
- 1) Con o sin orden expresa de Cristina, lo matan "servicios" leales al gobierno.
- 2) Lo asesinó un ex-agente de la SIDE con intención de cargar la muerte de Nisman sobre los hombros del gobierno: la "Teoría del Ronin".
- 3) A Nisman lo "suicidan" Servicios de Inteligencia (locales o extranjeros) enemigos del gobierno K: la "Teoría del Golpe Blando".
- 4) Mi teoría personal... Plan Condor 2.0: la hora del Hombre Gris!
Todas estas hipótesis serán mas o menos desarrolladas a lo largo del texto para tratar de entender las posibilidades. De buenas a primeras la muerte de Nisman no le conviene a nadie, menos a la continuidad política del modelo K. Éste evento ha dejado tan en claro la "brecha" que existe en la población argentina que da miedo. Una gran porción de la población, principalmente aquella vinculada al sector del agro, cree fehacientemente que el fiscal fue asesinado por orden expresa de Cristina Fernandez de Kirchner sin siquiera molestarse en bucear por la inmensa cantidad de recursos que existen en la Internet, al menos siquiera para confirmar o reforzar su teoría.
La mitad de la población ve en esa mujer diabólica la encarnación misma del mal y por tanto hay que prenderla fuego en la plaza pública. Si uno navega por las redes sociales y presta atención a los comentarios políticos promedio notará tanto de un bando como del otro un grado de violencia tan explícito que asusta en cuanto a lo poco que hemos avanzado en el entendimiento de cómo es la cosa para vivir en sociedad. Para decirlo sin rodeos, muchas personas realmente anhelan el regreso de un gobierno militar o similar que pongan orden a esta "debacle" en la que vivimos.
Ante tal escenario de profunda división social en la Argentina, creo importante adoptar una actitud mental "GRIS" tanto para investigar el caso Nisman, escribir ésta nota y/o finalmente leerla. Básicamente no creerle nada a nadie, no tomar partido, ser un humano libre de prejuicios, con la mente abierta a la información disponible; y no sólo a aquella que encaja en un posible esquema oficialista u opositor en mi cabeza. Rompamos con esa binomia de Buenos Vs. Malos por un momento y consideremos la posibilidad de que ésta historia en verdad sea de Malos Vs. Malos, con nosotros los pobladores (los buenos) en el medio mirando.
Importante aclaración inicial es que las fuentes citadas en el presente texto han sido deliberadamente resumidas para una rápida legibilidad del mismo.
¡Conspiranoia para Todos y Todas!
No hay motivo para NO ponerse conspiranoico con Nisman dado que la irregularidad ha sido norma general desde el principio del atentado de la Embaja de Israel hasta la fecha. Siendo que está plenamente blanqueado el hecho de que el fiscal tenía relaciones íntimas tanto con la embajada de Estados Unidos, como con la de Israel y el Mossad... Y siendo que estas naciones son señaladas por su costumbre de justificar incursiones militares por medio de ataques de falsa bandera; como el 9/11, la Maratón de Boston, Sandy Hook, y posiblemente Charlie Hebdo. ¿No es acaso lícito considerar todas las posibilidades dadas?
Dato de color: el cuerpo de Nisman fue enterrado en el cementerio judío de La Tablada mucho más cerca al "Monumento a los Caídos en la Defensa del Estado de Israel" que de sus parientes o víctimas de la AMIA.
Con esto no queremos lavar los pecados del gobierno ni adjudicar toda la culpa a ciertas prácticas diplomáticas desleales por parte de Israel y EE.UU. en su historia reciente. La idea es considerar otras hipótesis que la más simple y evidente, lo que la mitad del pueblo argentino piensa sinceramente: Cristina dio la orden de poner fin a la vida del Fiscal.
De buenas a primeras, es menester decir que en todo momento debemos sospechar del gobierno en la misma medida en la que se puede sospechar de cualquier otro actor involucrado. La forma de proceder por parte de los funcionarios públicos antes-durante-después de la muerte de Nisman han sido cuando menos irregulares. Gran parte de la investigación actual de la fiscal Fein a cargo del suicidio se han centrado en estos aspectos poco claros del caso.
Sólo por mencionar algunos puntos oscuros: el proceder de la custodia personal provista por la Policía Federal que tardó 11 horas en reportar a sus superiores la falta de contacto con el protegido; la llegada instantánea al lugar del Secretario de Seguridad Sergio Berni; las contradicciones entre los dichos del funcionario y la presidenta en cuanto a la hora en que fueron anoticiados del suceso; la atención médica solicitada a una empresa privada (Swiss-Medical) y no al SAME; el ingreso de Berni a la escena del crimen antes que el Juez y la Fiscal a cargo; un supuesto maletín retirado del departamento; entre tantas otros "dimes y diretes" varios que la prensa se encarga de propalar.
Por su parte, la CIA y el Mossad han comunicado extra-oficialmente que sus operadores locales encuadran la muerte de Nisman dentro de una operación independiente de los agentes de Servicio Secretos leales a la presidenta, quien no dio la orden de matar, sino que aquellos actuaron por cuenta propia para ganarse el favor presidencial. ¿Tal vez malinterpretaron un comentario de Cristina?
Sospechar del gobierno está bien y es necesario, lo digo sin miedo de ser llamado "gorila golpista"; porque confiar ciegamente en la pureza de alma de quién posee el poder es tan peligroso como considerarlo el culpable exclusivo de todos nuestros males. A fin de cuentas, continúe gobernando o no el kirchnerismo, de un modo u otro el poder y las riquezas del gobierno seguirán siendo inalcanzables para el hombre común y corriente como Usted o yo. Contentarse con el cambio de tirano es de obtusos.
De allí la necesidad de no caer en el simplismo llano de defenestrar al gobierno ni de defenderlo a capa y espada. El tiempo y las investigaciones tarde o temprano revelerán la verdad. Sólo cabe esperar que aquel día no nos halle arrepentidos de haber sido impulsivos y en nuestra ceguera, haberle hecho el caldo gordo a los verdaderos enemigos del Pueblo argentino. Y es en éste punto donde nuevamente debemos considerar con seriedad la posibilidad de que el "enemigo" en cuestión sea mucho más difícil de identificar como tal o cual grupo de poder pujando por mantenerse o acceder al gobierno; sino que se trate de una mixtura de políticos y empresarios tan indefinida como profundamente arraigada en la sociedad argentina.
Comencemos a dar vuelo a nuestra imaginación tomando como punto de partida el vínculo de Nisman con las Embajadas de Israel y Estados Unidos. Esto salió a la luz gracias a los cables diplomáticos revelados por Wikileaks. Pero no fue hasta que Santiago O’Donell, editor de Página/12, publicara sus libros Argenleaks (2011) y Politileaks (2014) que la información se hizo pública. Los cables diplomáticos revelan, entre otras cosas, una actitud de sumisión por parte del fiscal Nisman a la hora de acatar todo tipo de intervenciones en su investigación por parte de las embajadas. O'Donell especifica:
De buenas a primeras, es menester decir que en todo momento debemos sospechar del gobierno en la misma medida en la que se puede sospechar de cualquier otro actor involucrado. La forma de proceder por parte de los funcionarios públicos antes-durante-después de la muerte de Nisman han sido cuando menos irregulares. Gran parte de la investigación actual de la fiscal Fein a cargo del suicidio se han centrado en estos aspectos poco claros del caso.
Sólo por mencionar algunos puntos oscuros: el proceder de la custodia personal provista por la Policía Federal que tardó 11 horas en reportar a sus superiores la falta de contacto con el protegido; la llegada instantánea al lugar del Secretario de Seguridad Sergio Berni; las contradicciones entre los dichos del funcionario y la presidenta en cuanto a la hora en que fueron anoticiados del suceso; la atención médica solicitada a una empresa privada (Swiss-Medical) y no al SAME; el ingreso de Berni a la escena del crimen antes que el Juez y la Fiscal a cargo; un supuesto maletín retirado del departamento; entre tantas otros "dimes y diretes" varios que la prensa se encarga de propalar.
Por su parte, la CIA y el Mossad han comunicado extra-oficialmente que sus operadores locales encuadran la muerte de Nisman dentro de una operación independiente de los agentes de Servicio Secretos leales a la presidenta, quien no dio la orden de matar, sino que aquellos actuaron por cuenta propia para ganarse el favor presidencial. ¿Tal vez malinterpretaron un comentario de Cristina?
Sospechar del gobierno está bien y es necesario, lo digo sin miedo de ser llamado "gorila golpista"; porque confiar ciegamente en la pureza de alma de quién posee el poder es tan peligroso como considerarlo el culpable exclusivo de todos nuestros males. A fin de cuentas, continúe gobernando o no el kirchnerismo, de un modo u otro el poder y las riquezas del gobierno seguirán siendo inalcanzables para el hombre común y corriente como Usted o yo. Contentarse con el cambio de tirano es de obtusos.
De allí la necesidad de no caer en el simplismo llano de defenestrar al gobierno ni de defenderlo a capa y espada. El tiempo y las investigaciones tarde o temprano revelerán la verdad. Sólo cabe esperar que aquel día no nos halle arrepentidos de haber sido impulsivos y en nuestra ceguera, haberle hecho el caldo gordo a los verdaderos enemigos del Pueblo argentino. Y es en éste punto donde nuevamente debemos considerar con seriedad la posibilidad de que el "enemigo" en cuestión sea mucho más difícil de identificar como tal o cual grupo de poder pujando por mantenerse o acceder al gobierno; sino que se trate de una mixtura de políticos y empresarios tan indefinida como profundamente arraigada en la sociedad argentina.
Comencemos a dar vuelo a nuestra imaginación tomando como punto de partida el vínculo de Nisman con las Embajadas de Israel y Estados Unidos. Esto salió a la luz gracias a los cables diplomáticos revelados por Wikileaks. Pero no fue hasta que Santiago O’Donell, editor de Página/12, publicara sus libros Argenleaks (2011) y Politileaks (2014) que la información se hizo pública. Los cables diplomáticos revelan, entre otras cosas, una actitud de sumisión por parte del fiscal Nisman a la hora de acatar todo tipo de intervenciones en su investigación por parte de las embajadas. O'Donell especifica:
“Dicha conducta incluye el adelantarle a la embajada medidas judiciales tanto de la fiscalía como del juzgado que entiende la causa AMIA, llevar borradores de resoluciones a la embajada para ser corregidos hasta conseguir la aprobación de la sede diplomática, y disculparse reiteradamente cuando no se dio preaviso de alguna medida judicial del caso a los diplomáticos y agentes de dicha embajada estadounidense".
O'Donell además aclara que en su único encuentro personal con Nisman tras escribir <>, éste le reveló que su principal fuente de información en la causa AMIA era el agente Horacio "Jaime" Stiusso: el hasta entonces Director General de Operación de la Secretaria de Inteligencia de Estado, la famosa ex-SIDE. El mismo Nisman indica que Stiusso tendría relación fluida con la CIA y el Mossad.
Tal vínculo entre el fiscal y el agente secreto, y entre el agente y los servicios de inteligencia internacionales, es lo que dispara en O'Donell la idea de que la investigación y denuncia de Nisman contra la presidencia y varios de sus funcionarios bien puede tratarse de un "carpetazo" de los servicios, tras ser removido Stiusso de su cargo poco tiempo antes.
La misma presidenta Cristina Fernandez de Kirchner desliza ésta posibilidad en su 1era carta a la población, publicada el día siguiente al "suicidio", y la reafirma en la segunda carta, para finalmente terminar de rematar con la Cadena Nacional en la que anuncia un proyecto de ley para disolver de una vez por todas la vieja Secretaría de Inteligencia de Estado por una nueva institución.
Cristina ya en su primera carta mostraba dudas sobre el suicidio y apunta un listado de preguntas que indirectamente señalan a que detrás de los últimos movimientos de Nisman había una sombra oculta. Y entre otras cosas, no duda en vincular al diario opositor Clarín, como partícipe directo o indirecto de una operación política en su contra.
¿Quién es en realidad el titiritero escondido al que hace referencia CFK? ¿Empresarios? ¿Algún otro candidato presidencial? ¿Intereses internacionales?
El crímen tiene un un móvil, como dice Cristina en su 1era carta. Digamos que por el momento las dos versiones del asesinato por encargo tienen validez. Para el gobierno, callar a Nisman por su grave denuncia contra la presidenta, es la lectura más superficial y evidente, claro, y no por eso la adoptamos ni la descartamos. Pero ¿por qué la Presidenta en todas sus comunicaciones oficiales sobre Nisman apunta a la SIDE en particular: ¿quién daba órdenes o información a Nisman? ¿Y qué tiene que ver la SIDE en todo este asunto de su muerte? ¿Quién es ese tal Stiusso del que tanto venimos escuchando? ¿Se trata de un presunto sospechoso? ¿O de un chivo expiatorio?
- "WikiStiusso", por Santiago O'Donell
- "Detrás de Nisman", por Santiago O'Donell
- UNA NOTA RADIAL A O’DONELL: “Nisman me dijo que toda la info se la da Stiusso que es el enlace con la CIA y el Mossad”
- 1ra Carta de Cristina Fernandez de Kirchner al Pueblo argentino por la muerte de Nisman
- 2da Carta de Cristina Fernandez de Kirchner al Pueblo argentino por la muerte de Nisman
- El Rompecabezas Nisman - Revista Anfibia