Cristina Fernández ahora como principal figura de la oposición. (diariopopular.com.ar)
Por MAYLÍN VIDAL
(Especial para BOHEMIA de Prensa Latina)
Con el triunfo de la alianza Cambiemos en 15 de 24 distritos, las elecciones legislativas argentinas dibujaron un nuevo mapa político en el Congreso, con la expresidenta Cristina Fernández ahora como principal figura de la oposición. Los comicios del 22 de octubre último reflejaron a una Argentina fragmentada, polarizada, una ficha que quizás, para muchos críticos, ayudó a Cambiemos a consolidar su victoria en estas elecciones de medio término.
Tal fragmentación entre las fuerzas peronistas, en opinión de muchos especialistas, fue la franja que aprovechó el partido que llevó a Mauricio Macri al poder en 2015, y que ahora tendrá una buena representación en ambas cámaras.
De acuerdo con los resultados provisorios, en la de Diputados, Cambiemos también se benefició con la victoria que obtuvo en la capital argentina, la cual domina desde hace más de una década, y donde de los 13 curules en disputa, retuvo ocho y además sumó otros dos por Santa Fe, Tucumán y Entre Ríos, y uno en Córdoba. En el Senado, Cambiemos contará con 12 nuevos senadores para un total de 25, cifra similar a que tendrá el Frente para la Victoria. Lo que está hoy claro es que el Senado tendrá una voz opositora fuerte en Cristina Fernández y con larga data política, la misma que llevó las riendas de este país dos veces y que va dispuesta a hacerles frente a las políticas de ajuste al actual Gobierno, como dijo en sus fuertes discursos durante esta campaña, donde también denunció la sistemática persecución política y judicial a la que es sometida.
A contrapelo de todas las campañas en su contra, cada vez más arreciadas, Cristina llega convertida en senadora, cargo que ejerció en dos ocasiones (2001-2005 y 2005-2007) antes de llegar a la presidencia, y será, para muchos, la voz cantante que le dará la pelea al Gobierno.
Con su nuevo papel de senadora y un Frente con apenas cuatro meses de nacimiento, demostró que hay Cristina para rato sobre todo, como ha dicho: “porque sé que me necesitan”. Una vez conocidos los resultados finales de las elecciones, la exmandataria se dirigió a los presentes en la sede de esa fuerza política en la localidad bonaerense de Sarandí, donde dijo que “hemos sido capaces de sumar votos, de crecer a pesar de que nos hemos enfrentado a la más enorme e inédita concentración de poder de la que se tenga memoria desde la restauración de la democracia”, y agregó: “Debemos estar orgullosos de esta construcción, porque el resto de las fuerzas opositoras no han resistido el avance del oficialismo y nosotros sí hemos crecido”.
Por su parte, el presidente Mauricio Macri afirmó, exaltando el sentir nacionalista, que “vamos juntos. Para eso les digo como siempre: confío en ustedes y necesito que confíen en lo que son capaces de hacer. Esta es una generación que mira al siglo XXI, les quiero decir que ahí donde hay un argentino no hay límites”.
En un país donde muchos se quejan por el alza constante de precios y el ajuste económico, por el desempleo, donde vivir se hace cada día más asfixiante para la gran mayoría y en un año signado por marchas y protestas, lo cierto es que las elecciones demostraron el poderío que va afianzando a la alianza gobernante en casi toda la nación con miras a las elecciones presidenciales de 2019.
El próximo 10 de diciembre, cuando Macri cumpla exactamente dos años de asumir la presidencia, comenzará una nueva etapa en el Congreso y los flamantes legisladores asumirán su cargo, los diputados por un período de cuatro años y los senadores por seis, con varios temas en el candelero. El Gobierno necesita aprobar un paquete de leyes económicas, el presupuesto para 2018 y otros proyectos que ya caminan, como es el caso de la ley de la Responsabilidad Fiscal.