En la imagen, Razan al-Najjar, joven paramédica palestina asesinada por un francotirador israelí durante una protesta cerca de Khan Younis, el pasado 1ro. de junio Autor: APA Publicado: 25/08/2018 | 09:38 pm
GAZA, agosto 25.— La Organización para la Liberación de Palestina (OLP) denunció este sábado la cancelación de la ayuda a los programas humanitarios en la Franja de Gaza y Cisjordania, decretada por el presidente Donald Trump la víspera.
«La Administración de EE. UU. demuestra el uso del chantaje barato como herramienta política», señaló Hanan Ashrawi, miembro del comité ejecutivo de la OLP, en rechazo a la medida estadounidense de congelar un fondo de 200 millones de dólares destinado a financiar programas humanitarios en la Franja de Gaza y Cisjordania.
Mediante un comunicado publicado este sábado, la titular palestina ha indicado que la medida de Washington evidenció una vez más su postura proisraelí. EE. UU. castiga a los palestinos que «son víctimas de la ocupación israelí», ironizó Ashrawi, reportó HispanTV.
El presidente de EE. UU., Donald Trump, en declaraciones hechas al margen del Foro Económico de Davos, en Suiza, amenazó el pasado enero a los palestinos con represalias si no hacían lo que se les decía.
La nueva medida estadounidense se produjo tras el rechazo del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas, a sentarse a la mesa de diálogo con EE. UU. y el régimen de Israel, para cerrar lo que Washington llama «el acuerdo del siglo», un supuesto plan para solucionar la cuestión palestina, luego de que Trump decretara el traslado de su Embajada a Jerusalén y la reconociera como «capital» de Israel.
El Presidente de la ANP ha llamado a la iniciativa estadounidense «la bofetada del siglo», y ha asegurado que Palestina no aceptará una oferta de paz que no incluya su derecho a tener un Estado soberano con Al-Quds (Jerusalén) como capital.
El líder del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (Hamas), Ismail Haniya, ha calificado a su vez de «muerto» ese supuesto «acuerdo del siglo» de Trump por tener la meta de obligar a los palestinos a reconocer al régimen israelí y abrogar sus derechos en los territorios ocupados.
Funcionarios del Departamento de Estado anunciaron el viernes la decisión de congelar ese fondo de 200 millones de dólares sin dejar claro en dónde se emplearían, pero «se gastarán en concordancia con el interés nacional de Estados Unidos y proveerán valor a los contribuyentes de EE. UU.», señaló antiwar.com. El asesor de Seguridad Nacional John Bolton dijo que el corte se debió haber hecho «hace tiempo».
Este es el segundo re-direccionamiento de fondos de ayuda al exterior anunciado en una semana, pues el viernes 17, el Departamento de Estado informó que 230 millones de dólares en fondos inicialmente destinados a la reconstrucción de Siria habían sido igualmente retirados, para gastar en otras prioridades no especificadas, lo que permite a la administración gastar 430 millones en lo que quieran y sin decirle al Congreso ni a nadie su uso.
Algunos analistas califican de total cinismo la información del Departamento de Estado, el cual argumenta que «esta decisión toma en cuenta los desafíos que enfrenta la comunidad internacional en la prestación de asistencia en Gaza, donde el control de Hamas pone en peligro la vida de los ciudadanos de Gaza y degrada una ya terrible situación humanitaria y económica».
Antiwar apunta que el anuncio del cese de la ayuda llegó justo a unos días de que el presidente Trump prometiera a los palestinos darles «algo bueno».
Paralelamente, Bolton —quien esta de visita en Israel— dijo que la administración Trump podía detener los fondos que dan al Consejo de Derechos Humanos de la ONU, de donde la embajadora Nikki Haley se retiró a comienzos de 2018, alegando posiciones antisraelíes de ese organismo de Naciones Unidas.
El viernes, al menos 190 palestinos resultaron heridos en Gaza —50 de ellos alcanzados por fuego real—, durante la represión por parte de Israel a otra Marcha del Retorno que estuvo dedicada a honrar a los periodistas y los grupos médicos que arriesgan sus vidas por realizar su labor.