El presidente constitucional de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo este jueves que Asia es el destino donde Caracas planea colocar la producción de crudo que exportaba tradicionalmente a EE.UU.
"Tenemos muchos años construyendo la ruta de Asia, es una ruta exitosa, es el mercado natural", sostuvo Maduro durante una entrevista concedida a la agencia AP. "Cada vez nos exigen más volúmenes de petróleo", añadió al respecto.
"Instrumento circunstancial"
Durante la entrevista, Maduro reiteró que el autoproclamado "presidente encargado", Juan Guaidó, es "un instrumento circunstancial" impuesto por la embajada de EE.UU.
Dijo que, según sus informes de inteligencia, los funcionarios norteamericanos se refieren a Guaidó como un "simple agente" en Venezuela. De igual forma, lamentó las recientes actuaciones del jefe del Parlamento porque "ha violado la Constitución y las leyes".
El mandatario aseveró que Guaidó está al tanto de las responsabilidades judiciales que acarrean las acciones que ha emprendido desde el pasado 23 de enero, cuando se autojuramentó como "presidente encargado" en una plaza pública, con el inmediato reconocimiento de EE.UU. y algunos países de Europa y América Latina.
"Él tiene altas responsabilidades en los crímenes y delitos que está cometiendo", aseveró el mandatario.
En conversación con AP, Maduro ratificó su disposición a dialogar con todos factores de la oposición venezolana.
"Ojalá prospere el diálogo y no sigan sonando los tambores de guerra", indicó. Al respecto, el mandatario manifestó que por la paz y el diálogo hará "todos los sacrificios que sean necesarios".
"Show mundial"
Consultado sobre el proceso de "ayuda humanitaria" que promueve EE.UU. en la frontera con Venezuela, el presidente Maduro tildó la acción como "una campaña política parcializada" que intenta, a su juicio, humillar a los venezolanos con "migajas" presentadas en un "show mundial".
"Venezuela tiene que resolver sus problemas (económicos) a través del trabajo y la producción", destacó.
Asimismo, instó al presidente Donald Trump a atender a los "40 millones de hambrientos" en EE.UU., antes de "ayudar" a Venezuela, al tiempo que adelantó que próximamente recibirá apoyo de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para "garantizar las medicinas, los alimentos del país, en un plan que no es un show".