El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, ha anunciado este lunes la decisión de las autoridades estadounidenses de retirar a todos los diplomáticos, que aún se encuentran en Venezuela. "EE.UU. retirará todo el personal restante de la Embajada de EE.UU. en Venezuela esta semana", reza la publicación de Pompeo en su cuenta de Twitter.
De acuerdo con sus afirmaciones, la decisión "refleja el deterioro de la situación" en Caracas, así como "la conclusión de que la presencia del personal diplomático de EE.UU. en la Embajada [en Caracas] se ha convertido en un obstáculo para la política" del Gobierno estadounidense.
El pasado 24 de enero, Estados Unidos ordenó a parte de su personal diplomático salir de Venezuela por razones de seguridad. La decisión se produjo un día después de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, anunciara la ruptura de relaciones diplomáticas y políticas con Washington y ordenara la salida del personal de la Embajada estadounidense tras la autoproclamación del diputado opositor Juan Guaidó como "presidente encargado" del país sudamericano y su reconocimiento como tal por parte de EE.UU.
"He decidido romper relaciones diplomáticas y políticas con el gobierno imperialista de EE.UU. Fuera, ¡se van de Venezuela!, aquí hay pueblo para defender a Venezuela", dijo Maduro y alertó que Washington dirige una operación para imponer "a través de un golpe de Estado" un gobierno "títere a sus intereses".
A finales de febrero, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, indicó que Moscú está monitoreando atentamente los acontecimientos en torno de la situación en Venezuela y que ve por parte de EE.UU. "intentos completamente descarados de crear de manera artificial un pretexto para la intervención militar".