En la fortaleza de Ailech (en el actual condado de Donegal) encontró a tres reyes que discutían
sobre cómo dividirse entre ellos la tierra de un cuarto, que había muerto.
Ith les encaminó a que depusiesen las armas y que disfrutasen la vida en aquella tierra en que vivían,
tan fértil y con buen clima.
Los reyes creyeron entender en sus palabras un deseo de conquista, por lo que le tendieron una
emboscada cuando regresaba a su barco, de la que resultó mortalmente herido.
Cuando se enteraron de esa traición, Los Hijos de Mil decidieron tomarlo como una declaración
de guerra y se dispusieron a invadir la isla.
A la primavera siguiente partieron de Brigantia 5 barcos con 40 jefes guerreros, sus mujeres y
servidumbre, entre ellos Amergin, hijo de Golam.
Al llegar, un 1 de mayo, día decimoséptimo de la luna, los Tuatha de Danann se hicieron los
ofendidos por ese ataque de improviso, por lo que Amergin determinó que se alejarían con sus
barcos a una distancia de nueve olas (en la Galicia actual aún se conservan rituales relacionados
con nueve olas) y después atacarían.
Entonces los druidas de los danianos provocaron una tormenta mágica que dispersó los barcos
mar adentro.
Amergin consiguió parar la tempestad invocando al espíritu de la tierra de Irlanda, con quien se
había comunicado con anterioridad.
Todos se salvaron excepto Donn y los de su barco, que serían tragados por las aguas tras jurar
aquel que mataría a todos los habitantes de la isla.
Los Tuatha de Danann serían derrotados en Sliabh Mis y en Tailtiu, pasando los supervivientes a
vivir en el sidhe, algo así como el mundo subterráneo al que se accedía a través de los dólmenes y
otro tipo de edificios de la más remota antigüedad que había en las colinas.
Por su parte, los hijos de Mil quedaron gobernados por los hermanos Eremon y Eber Finn, que
no lograron ponerse de acuerdo y se dividieron al personal y a la isla, quedando el norte para el
primero y el sur para el segundo.
Y esta invasión sería la última, ya que no hubo ni plagas ni otros invasores (las invasiones vikingas
y normandas fueron muy posteriores y muy parciales), por lo que aquellos Hijos de Mil, procedentes
de España, serían los antecesores de los irlandeses actuales.
Saludos Nataly