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Respuesta  Mensaje 1 de 6 en el tema 
De: Georgina  (Mensaje original) Enviado: 31/08/2011 05:56
No lo encontre en espaniol sorry como quiera denle una pasadita si les interesa.
 

http://www.census.gov/foreign-trade/data/index.html
 


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Respuesta  Mensaje 2 de 6 en el tema 
De: Dream7 Enviado: 31/08/2011 17:18
Un saludo Georgina 
 


Respuesta  Mensaje 3 de 6 en el tema 
De: Georgina Enviado: 01/09/2011 19:14

TLC "plus", el nuevo desafío a la nación mexicana

Alejandro Villamar*

Si las negociaciones secretas entre Carlos Salinas y los gobiernos de Estados Unidos y Canadá dieron origen al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), mediante un giro jurídico profundo para que en México se garantizara la permanencia de la estrategia neoliberal, convirtiéndola en ley supranacional (de hecho, la entrada en el Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio, en 1985, era ya neoliberal), los actuales actos y negociaciones cuasi-secretas de Vicente Fox sobre un TLC "Plus" se encaminan a una inserción más subordinada del país y a la pérdida definitiva de la soberanía nacional.

Después de diez años de vigencia del TLCAN, altos círculos financieros internacionales, corporaciones trasnacionales y trasnacionalizadas y las élites políticas de los tres países, coinciden en que el TLCAN ya no es suficiente, se agotó su potencial de cambio. Para ellos, se requiere profundizar la llamada reforma estructural, pues ha llegado la hora de instrumentar la agenda completa de integración corporativa norteamericana, sin necesidad de ponerla a discusión nacional, al menos en México y, en paralelo, construir los consensos entre las élites de los tres países que conduzcan a la formalización jurídica de un bloque estratégico de naciones norteamericanas.

Esto que parece exagerado y alarmista, no es sino una lectura cuidadosa de las demandas, acciones, discursos y cabildeos de las élites políticas y empresariales de los tres países miembros del TLCAN, hecha por miembros de las redes civiles de Canadá, Estados Unidos y México.

Analizar, discutir y consensar agendas civiles para enfrentar esta perspectiva resulta un reto muy importante para la región, pero para los ciudadanos de México es una responsabilidad impostergable para defender la existencia y viabilidad de nuestro país.

En este llamado a la reflexión serena, comprometida y, sobre todo, a la construcción creativa de alternativas sociopolíticas nacionales y regionales, compartimos los elementos básicos que nos han conducido a plantear este desafío corporativo e iniciar el debate político.

El discurso en boga

Más allá del recuento de los impactos sociales, ambientales y económicos del TLCAN y de la construcción de alternativas y de las acciones de resistencia y organización que la Red Mexicana de Acción Frente al Libre Comercio (RMALC), junto con un numero creciente de organizaciones sociales y académicas, hemos propiciado y realizado a lo largo de diez años, se ha impuesto en México una ideología y una política económica corporativa, mercantilista y neoliberal que permea amplios sectores sociales, considerándose como natural, "racional", sin necesidad de ninguna demostración y priorizando el discurso económico frente al discurso socio político o simplemente democrático.

Es por ello que frente al TLCAN, los neoliberales de siempre y los opositores iniciales han terminado planteando que "no hay que quedarse a medias" en materia de reformas, pues la escasez de resultados positivos no se explica por las políticas puestas en práctica, sino por no haberlas puesto en acción de manera profunda1.

Desde 2002, los intelectuales orgánicos del Banco Mundial sacaron a la luz su sentencia y receta guía: "El TLCAN no es suficiente", hay que avanzar y profundizarlo.

Sin embargo, mas allá del discurso, las pautas del TLCAN aceleraron procesos complejos que incluyen la destrucción de las capacidades económicas, tejidos sociales y construcciones culturales. Lo anterior, ha propiciado el dominio inusitado de sectores enteros y estratégicos del país por parte del capital trasnacional o trasnacionalizado.

Nos han querido acostumbrar a un país que cada día pierde autonomía e independencia. Parece natural que estuviéramos acostumbrados a esa situación. Veamos ejemplos:

Carece de un sistema bancario. Excepto dos pequeños bancos, los demás son 100 por ciento extranjeros. La banca no cumple con su función de otorgar crédito a las actividades productivas, pero vive a expensas de los jugosos réditos que le paga el endeudado gobierno.

Carece de una política industrial y de muchas otras políticas públicas de Estado, pues "la mejor política es carecer de ella" o que la verdadera política sea la dictada por la mano seudo invisible del mercado corporativo trasnacional en alianza estratégica con sus homólogos locales (Consejo Coordinador Empresarial, COECE, consejo de banqueros en México, etcétera).

Carece de una política de empleo nacional, pues se acepta que al menos un tercio de la nueva mano de obra de cada año se juegue la vida al migrar al norte, admirándose de que las remesas sean la primera fuente de divisas para el país y que se haya convertido, por medio de las comisiones, en un jugoso negocio de los intermediarios financieros.

No es posible aceptar que las llamadas "leyes modelo" elaboradas por los intereses y poderes trasnacionales, aderezadas con condimento o sazón local, se presenten en el Poder Legislativo y sean aprobadas como las soluciones a nuestros problemas nacionales.

Tampoco, que la conducta de la mayoría de los actores de la esfera política sea cada día más un servicio a la carta de los poderes trasnacionales y que estos poderes influyan económicamente en la elección de los representantes que convalidan, por razones de "realismo político" y "modernidad", esta agenda lesiva para el país.

Frente a la carencia de proyecto de nación soberano quieren acostumbrarnos a que el único camino es profundizar el TLCAN para "moder-nizar" nuevamente el país. En este contexto, se ubican de manera "natural" las recientes propuestas que Vicente Fox y Ernesto Derbez expusieron ante un numeroso grupo de "distinguidos" empresarios y funcionarios públicos (más de 650) de Estados Unidos y México en el marco de la llamada Sociedad para la Prosperidad, anunciada por los presidentes de México y Estados Unidos en septiembre de 2001.

Propuestas concretas para la integración norteamericana

El 28 de junio de 2004, en Guadalajara, Vicente Fox propuso redefinir la alianza del bloque estratégico de América del Norte a partir de los siguientes puntos: a) mayor integración financiera, b) sistema aduanero uniforme, c) política de energía común, d) sistemas de seguridad acordados, e) red de comunicaciones y transportes e f) instituciones y leyes alineadas2.

Para el secretario Derbez, "tenemos que definir esta relación en términos de los mercados, por lo cual resulta importante la intención de los presidentes Fox y Bush de redefinir la alianza del TLCAN, bautizado inicialmente por el primero como NAFTA "Plus" e instrumentado recientemente por medio de la Asociación para la Prosperidad. El secretario de Relaciones Exteriores afirma que "tenemos que establecer normas comunes que permitan al inversionista tener la seguridad su inversión", a la par del crecimiento del "mercado de capitales comunes". Derbez advierte que la relación "no sólo será definida por el sector público, sino también y principalmente por el sector privado...". Por lo tanto, piensa también en un programa común de infraestructura que contemple la construcción de carreteras, puertos y aeropuertos, "para que los hombres y mujeres de empresa, puedan ir avanzando de una manera clara en su proceso de inversión e intercambio comercial"3.

La respuesta estadounidense

De manera paralela a la reunión de la Sociedad para la Prosperidad, en encuentros bilaterales con el secretario Canales Clarión, Donald Evans, secretario de Comercio estadounidense, destacó el "compromiso del gobierno de George W. Bush para identificar los obstáculos que encuentran los negocios de Estados Unidos cuando tratan de ingresar al mercado de México y resolverlos". Evans, habló sobre la manera de mejorar la protección de derechos de propiedad intelectual, transparencia normativa y eliminación de barreras comerciales no arancelarias4.

Por su parte, la embajada de Estados Unidos destacó los que a su entender fueron los principales resultados de la Sociedad para la Prosperidad5:

-La Agencia de Comercio y Desarrollo de Estados Unidos (USTDA, por sus siglas en ingles) promueve los sectores de infraestructura, transporte y servicios financieros a través de estudios de factibilidad, apoyo y asistencia técnica. El año pasado, el USTDA otorgó apoyos y fondos para proyectos de desarrollo en 12 actividades prioritarias para México, mismas que abarcan, entre otras, la modernización de aeropuertos, al desarrollo de la industria del capital de riesgo, sistemas de aguas y residuos, redes de transporte inteligentes y financiamiento para la vivienda.

-En el 2003 concluyeron las negociaciones de un acuerdo que permitirá a la Overseas Private Investment Corporation (OPIC) ofrecer programas para apoyar la inversión extranjera productiva en México. El acuerdo de promoción de las inversiones fue aprobado por el Senado de la República el pasado mes de abril. Las áreas identificadas como prioritarias para recibir apoyos son vivienda, agua, educación e infraestructura municipal.

-Con el apoyo conjunto de Banobras, la Agencia Internacional de Desarrollo de Estados Unidos (USAID, por sus siglas en ingles) y la empresa asesora estadounidense en finanzas Evensen Doge Internacional, los estados de Michoacán, Hidalgo, Nuevo León, Estado de México, Veracruz, Chihuahua, Morelos, Distrito Federal, y los municipios de Aguascalientes, Cancún, y Tlalnepantla, han emitido certificados de deuda para financiar necesidades de infraestructura clave.

-El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) concluyó acuerdos de cooperación con instituciones académicas y centros de investigación estadounidenses, con el fin de otorgar más becas a estudiantes mexicanos, promover el intercambio de académicos y colaborar en programas de investigación conjunta.

-Instituciones financieras privadas han ampliado sus servicios durante el último año y agencias financieras estadounidenses continuarán enfocándose en aumentar el acceso a los servicios de remesas. Por ejemplo, el programa Money Deposit Insurance Corporation (FDIC) ha proporcionado capacitación financiera a más de 35 mil Smart de la Federal migrantes mexicanos en Estados Unidos.

-El Banco de México (Banxico) y el Sistema de la Reserva Federal de Estados Unidos iniciaron las primeras operaciones de transferencias electrónicas de fondos internacionales. Este nuevo sistema electrónico permite la realización de transferencias de pagos comerciales y gubernamentales transfronterizos, fortaleciendo la interconexión financiera de ambos países.

La posición canadiense

Bajo la dirección del partido liberal, con una clara agenda neoliberal, el Comité Permanente de Asuntos Exteriores y de Comercio Internacional del Parlamento canadiense, redactó el documento "Socios en América del Norte. Promover las relaciones de Canadá con Estados Unidos y México"6, estudio que recoge la percepción tanto de "integracionistas" como de "soberanistas" (inclusive la percepción de legisladores e ideólogos empresariales mexicanos).

Respecto a las llamadas "opciones de integración descendente" de la región el documento puntualiza: "Una de las alternativas consistiría en seguir el ejemplo europeo y adoptar una progresión lógica, que iría de los acuerdos de libre comercio (la forma más débil de integración) a (1) la unión aduanera, (2) al mercado común y, finalmente, (3) a la unión económica. Presumiblemente, haría falta algún tipo de tratado internacional entre los tres países miembros del TLCAN o entre Canadá y Estados Unidos para formalizar las nuevas relaciones."

Sin embargo, el estudio señala que las "opciones son más complejas de lo que parecen. En la práctica, las distintas etapas de la integración no suscitan todas el mismo nivel de cooperación supranacional. Por ejemplo, en un área sumamente importante, la de los recursos legales de protección comerciales, Canadá no deja de reclamar una mayor cooperación con relación a la utilización de los recursos comerciales (cuotas antidumping y compensatorias) en América del Norte. Estos recursos legales de protección comerciales parecen ilógicos en un contexto de liberalización creciente del comercio, y aún queda mucho por hacer para eliminar su uso en el continente".

Los parlamentarios canadienses consideran también enfoques ascendentes "frente a la perspectiva de una integración económica y de problemas transfronterizos relacionados con la protección del medio ambiente, las migraciones y el transporte. La cooperación norteamericana es imprescindible a fin de que cada país pueda alcanzar sus objetivos económicos, sociales, ambientales y de seguridad.

En el documento canadiense se concluye que existen dos opciones para realizar cambios más progresivos y menos estructurados: "la integración de América del Norte se está produciendo fuera de un marco de mercado común oficial, y algunos sectores ya están experimentando presiones en favor de una convergencia o una armonización de las políticas. Estas presiones se intensificarán a medida que progrese la inevitable integración de la economía canadiense y la economía estadounidense. Ante esta realidad, se propone que se consideren mecanismos más flexibles para facilitar la movilidad transfronteriza en la región del TLCAN y para garantizar una convergencia gradual de las políticas. Este enfoque ascendente supone una convergencia tanto en ámbitos políticos como en cuestiones fronterizas, transporte, movilidad de la mano de obra, competencia a nivel fiscal, tipos de cambio, reglamentos y política de competencia, política comercial administrativa (cuotas antidumping y compensatorias), problemas medioambientales y de recursos, así como derechos de propiedad intelectual. Existe otra opción, que reconoce la necesidad de mejorar las relaciones entre los países de América del Norte estableciendo, al mismo tiempo, un curso de acción realista. Se trata de lo que se denomina la "interoperabilidad". Según esta fórmula, cada país mantiene sus propios sistemas y políticas, pero garantiza al mismo tiempo que éstos permitan a los otros países "cooperar de forma eficaz y continua en áreas en las que su profunda interdependencia significa que una falta de cooperación que podría acarrear pérdidas importantes. Este tipo de acuerdo podría ayudar a fortalecer relaciones económicas y seguras mutuamente ventajosas sin comprometer los poderes existentes de las legislaturas nacionales".

Estos razonamientos llevaron a los parlamentarios canadienses a una de las más importantes recomendaciones, la número 31: "el gobierno de Canadá debería abordar la integración económica de América del Norte con un enfoque doble. Deberían eliminarse de forma progresiva, y de concierto con los otros países socios del TLCAN, los obstáculos conocidos que impiden una realización más eficaz de las transacciones transfronterizas. Aunque el comité no ha adoptado una postura con respecto a las ventajas de una unión aduanera norteamericana, creemos que sería útil que el gobierno realice paralelamente un estudio detallado de las ventajas e inconvenientes del concepto de unión aduanera en el contexto de América del Norte. Este estudio podría evaluar la posibilidad de utilizar la integración de la industria norteamericana del acero, entre otras, como modelo de algún tipo de una unión aduanera más amplia."

Para los legisladores del bloque quebequés, el documento del comité parlamentario "tiene buenas ideas, pero no va más allá de las intenciones". Celebra que muchas de las re-ferencias sociales que ellos propusieron hayan sido citadas. Adiciona nuevas propuestas, entre ellas la de aumentar decididamente la relación con México y defender la soberanía respecto a Estados Unidos.

El Nuevo Partido Democrático (NPD), enfático, expresa que "discrepa del contenido de este informe. Lejos de profundizar la integración entre Canadá y Estados Unidos, los neodemócratas creen que debemos reafirmar nuestra soberanía y nuestra independencia. Si no deseamos perder nuestro país debemos resistir con determinación una mayor dominación económica, militar o social de Canadá de Estados Unidos y mejorar nuestra capacidad para proteger plenamente nuestra soberanía y para hacer que se oiga y respete nuestra voz independiente en el ámbito internacional.

Con el fin de mantener su identidad, sus valores, sus instituciones y su voz independiente en los asuntos mundiales, Canadá debe actuar con mucha reserva al elegir las formas de asociarse con sus vecinos del continente. El NPD cree firmemente que no debe seguirse adelante con una mayor integración de los países de América del Norte basada en acuerdos de libre comercio y en la primacía de la "competitividad", porque eso ha reducido enormemente la soberanía de Canadá en varias cuestiones estratégicas y ha debilitado el poder democrático de los canadienses para determinar su futuro. En virtud del TLCAN, Canadá ha expuesto muchas de sus instituciones más preciadas a la mercantilización y la privatización. Con el fin de fomentar sus vínculos económicos con Estados Unidos, Canadá se ha visto forzado a adherirse cada vez más a las posiciones políticas estadounidenses, tanto en el ámbito interno como en el de las relaciones internacionales."

La Comisión de Libre Comercio del TLCAN avanza en los acuerdos trinacionales

Dos semanas después de la reunión de Sociedad para la Prosperidad, la Comisión de Libre Comercio del TLCAN, integrada por los ministros de comercio de los tres países, se reunió en Texas y produjo la declaración conjunta "Una década de logros", donde comunican su compromiso de "profundizar la integración económica en América del Norte, mejorar el comercio y la inversión mediante la disminución de los costos de transacción u otros obstáculos administrativos y explorar diversos mecanismos para integrar aún más nuestras economías a través del comercio".

La comisión mencionada informó de un acuerdo preliminar para liberalizar las reglas de origen en una amplia gama de productos, tales como alimentos, bienes industriales y de consumo, así como para aquellos productos en los cuales los tres países tienen un arancel cero de nación más favorecida.

Por otro lado, el comité afirma que "ha mejorado la operación del mecanismo de solución de controversias inversionistas-Estado, incluido en el capítulo de inversión del TLCAN. Señala que a principios de este año un tribunal aceptó escritos entregados por una parte no litigante"7.

Como puede concluirse, los súper ministros o súper secretarios de comercio de las tres naciones avanzan por la línea que los parlamentarios canadienses denominan "enfoques ascendentes", pero en la perspectiva de sentar las bases de los "enfoques de integración descendentes".

Y mientras tanto...

En México, el desafío de la integración subordinada y pérdida de la soberanía del país, bajo un TLC Plus en marcha, está ausente del debate nacional.

Están presentes las luchas de resistencia de indígenas, campesinos, sindicatos, y muchos otros actores sociales, así como la resistencia parlamentaria a las reformas estructurales del gobierno y sus poderosos aliados trasnacionales.

Crece cada día la idea de imaginar y construir un proyecto propio de país8, aunque todavía los principales actores políticos profesionales no tienen en su agenda política la respuesta y la convocatoria a desafiar activa e integralmente el TLC Plus.

La demanda social mínima es exigir la discusión democrática de estos planes contra el pacto constitucional.

* El autor es responsable del Área de Medio Ambiente y Desarrollo de la Red Mexicana de Acción Frente al Libre Comercio (RMALC).

1 Un ejemplo de asimilación y propaganda de esta posición es promovido por Jorge Castañeda en Somos Muchos. Ideas para el mañana, Planeta, 2004.

2 Numerales añadidos por el autor. Disponible en: www.presidencia.gob.mx/?P=16&Orden=Leer&Tipo=DI&Art=8496

3 Disponible en: http://www.sre.gob.mx/comunicados/discursos/disc_2004/junio/d_08_06.htm

4 Boletín de Prensa Oficial de la Secretaria de Comercio de Estados Unidos, 28 de junio de 2004.

5 Boletín de Prensa de la Embajada de Estados Unidos en México, apoyado por la Oficina de Programas de Información Internacional del Departamento de Estado de Estados Unidos. Disponible en http://usinfo.state.gov/espanol/mexico/04062904.htm

6 Disponible en español en http://www.parl.gc.ca/InfoComDoc/37/2/FAIT/Studies/Reports/faitrp03/03-cov2-s.htm

7 Disponible en: http://www.economia.gob.mx

8 Como ejemplos recientes están: "Vision de México como Estado nación a futuro" en: A. Martín del C. Montoya (coord.), "México hacia el 2025", Centro de Estudios Estratégicos Nacionales, Noriega-Limusa, Mexico, 2004; y David Márquez Ayala, "México 2006: el choque económico", 3era. parte, Reporte Económico, La Jornada, México, 16 de agosto de 2004.


Respuesta  Mensaje 4 de 6 en el tema 
De: Dream7 Enviado: 02/09/2011 17:33

Un saludo Georgina

Respuesta  Mensaje 5 de 6 en el tema 
De: Georgina Enviado: 02/09/2011 21:26

 Myths and Realities about Energy Production in the Gulf

There has been much discussion — and spin — recently on the state of responsible American energy production, the most contentious of which has developed around producing oil offshore in the Gulf of Mexico. Despite a clear slowdown in permitting since last year’s moratorium, and the very real economic hardship this has imposed on businesses and consumers across the nation, many have chosen either to deny there is a problem or simply blamed those impacted by the federal government’s decision to significantly slowdown development of our offshore energy resources. Given the state of our economy and the economic benefits that await us if we resume normal operations in the Gulf, it’s important that Americans are armed with the facts about the stark reality of declining Gulf energy production.

Below are five common myths being pushed about domestic oil production, especially in the Gulf of Mexico, accompanied by a description of what’s happening in reality.

Myth: The Gulf of Mexico has returned to normal production levels and there is no “permitting freeze” in place. Reality: It would be nice if this was reality, but this simply isn’t the case. The permitting freeze is real and Americans are suffering every day as a result, a fact that can be seen simply by reviewing historical data. Between 2005 and 2010, the annual average number of offshore permits approved sat comfortably at 545. Since May 2010, only 113 permits have been approved. But upon even closer inspection, you find that these 113 permits are actually for only 34 wells since each well requires multiple permits resulting in multiple regulatory hurdles. Only by denying this reality could one conclude there is no dramatic slowdown in permitting. While it is true that the Gulf of Mexico is still producing oil, it is doing so at a much lower rate. According to the U.S. government’s Energy Information Administration, Gulf production is expected to decline to 1.39 million barrels per day in 2012, or 400,000 barrels per day below the average production rate in 2009 (1.7 million barrels per day). Some have suggested that total U.S. production has increased, so the impact on the Gulf must be overstated. But that’s clearly not the case, as the EIA data clearly shows.

Myth: Rigs aren’t leaving the Gulf of Mexico, so our production base there will be fine. Reality: To date, nearly a dozen rigs have left the Gulf since the White House imposed its moratorium last spring, each taking with them hundreds of jobs and millions of dollars in economic potential. In a capital intensive industry like energy production, companies need a predictable permitting process with a commensurately predictable level of permitting. Each day a rig sits idle, that’s millions of dollars in lost revenue. Absent a predictable investment climate, energy companies will move elsewhere, which ultimately means we will import more energy. The fact that more rigs haven’t left doesn’t mean they won’t; it just means they haven’t left yet. Imagine owning a business and paying rent for the space you have in the building, but the local government tells you that you can’t open your doors. You may wait awhile to see what happens, but eventually you’ll find a different location that will allow you to operate and generate revenue so you can pay your bills. And you won’t likely consider the prospect of ever going back, even if the original location changes its rules. Why take the risk of getting shut down again?

Myth: We should be focusing on creating new jobs in alternative energy and stop producing oil. Reality: Indeed, as we have long advocated here, America does need a sensible long-term all of the above energy policy that seeks to expand production from all sources, from renewable to traditional sources like oil and gas. But America also desperately needs jobs, and we need them now. Renewables should be encouraged starting today, with the recognition that they are years away from being able to supply our country with the affordable energy it needs. A recent IHS-CERA report entitled “Restarting the Engine” shows that just by resuming production in the Gulf to its pre-moratorium levels could create 230,000 jobs in 2012 and an additional 199,000 jobs in 2013. Look no further than North Dakota and Oklahoma to see how responsible oil and gas production can create jobs: North Dakota’s unemployment rate is a resoundingly low 3.3% and Oklahoma’s is 5.5%, both well below the national unemployment rate that has been stuck above 9% for more than two years.

Myth: We need to wait until the federal government “gets it right” on safety in the Gulf before we resume drilling. Reality: No one is calling for abolishing safety standards, but those standards need to be feasible and applied in a consistent and timely manner. Companies in the Gulf – not just production companies but also the countless workers in countless jobs who support the offshore industry or need reliable oil and gas to conduct business or manufacture products – have been forced to burn through what little cash reserves they have, lay off employees, reduce benefits, and even tap into retirement savings, all because the current permitting approval process is broken. How is the government protecting the Gulf by imposing such avoidable economic pain? Moreover, if the government needs to “get it right” on a regulatory structure, it’s interesting to note that 5 of the 7 scientists hired by the federal government to make safety recommendations after the Macondo accident last year never recommended or supported a moratorium, and a federal judge declared the moratorium “arbitrary and capricious.” The idea that the current slowdown is a means of “getting it right” not only defies common sense, but also scientific and legal expertise. To get an idea of just how much pain the permitting slowdown is inflicting on hardworking Americans – along the Gulf Coast and indeed throughout the country – just visit OpenTheGulf.org.

Myth: We should expand renewables to reduce our reliance on unstable regimes for our energy. Reality: We absolutely need to expand our renewable energy capacity, as well as energy efficiency technologies and conservation. But the inescapable fact is we’re also going to be using oil for decades to come, and its better that we produce that oil here at home instead of sending our money elsewhere. Already in 2011, the US has sent almost $250 billion overseas to meet our national oil needs as we report in our Imported Oil Counter onwww.moreenergynow.org. IHS-CERA estimates that resuming full permitting would allow the United States to produce 150 million more barrels of oil in 2012, each barrel of which is one more barrel we don’t have to buy from overseas. This comes out to America reducing the amount of money that it sends foreign governments for energy by $15 billion. And this considerable strengthening of energy security could be realized if the Administration simply resumed permitting to what it was before the costly moratorium was imposed.

Resuming responsible energy production in the Gulf of Mexico is needed now more than ever. We need to create more jobs, increase available energy supplies, and help end the needless pain being felt along the Gulf Coast. By discarding the spin and getting back to reality, it’s clear that we can achieve these goals and finally move forward. Again, for more information on the real impacts of this slowdown, we suggest readers check out the compelling stories posted at OpenTheGulf.org.

 

Respuesta  Mensaje 6 de 6 en el tema 
De: Dream7 Enviado: 03/09/2011 21:30

Aguas profundas: mitos y realidades sobre Pemex

 Fabio Barbosa Cano*

En el golfo de México existen áreas en las que el lecho marino se encuentra situado más allá de los 200 metros, llamadas aguas profundas. A continuación, abordaremos dos aspectos en torno al debate que se desarrolla al respecto: primero, el potencial petrolero que contienen esas áreas en aguas profundas y, segundo, el problema de la supuesta incapacidad de Pemex para explotar por sí solo esa riqueza. Algunos sostienen que necesariamente tendrá que ampliarse la apertura para que compañías extranjeras la auxilien en los trabajos de exploración y explotación de esos recursos; los más agresivos señalan que Pemex sufre un rezago tecnológico tan grande que necesariamente tendrá que asociarse con los extranjeros y compartir la renta petrolera.

Empezaremos con las evaluaciones de los recursos; por razones de espacio nos limitaremos a algunas de las evaluaciones formuladas por científicos mexicanos, responsables de la exploración petrolera en Pemex o a las cifras oficiales difundidas por la paraestatal.

Desde comienzo de los años noventa, Pemex reemprendió importantes campañas de exploración en el golfo de México para hacer el descubrimiento de algunos campos en aguas profundas. En relación con la evaluación de los recursos, señalemos que hacía finales del decenio comenzaron a publicarse algunos resultados. En 1998, el doctor Pablo Cruz Helú, doctorado en geología en la Universidad de Texas en Austin y, en ese momento, responsable de la Coordinación de Exploración en Pemex, conjuntamente con el también geólogo Javier Meneses, expusieron en una conferencia científica el mapa de una verdadera nueva geografía petrolera. La importancia de su disertación fue que, por primera vez, se reconocía, por parte de funcionarios de Pemex, la existencia de áreas petroleras como "Lamprea", "Lankahuasa" o las "Mexican Ridges"; en ese trabajo preliminar, no adelantaron evaluaciones1. En 1999, el ingeniero Cevallos Soberanis, director de Pemex Exploración y Producción (PEP), informó sobre la primera evaluación de los hallazgos utilizando sísmica de tres dimensiones en el golfo de México2. En 2000, en ponencias presentadas en eventos internacionales, los ingenieros Jorge Nieto, Rafael Navarro y Antonio Sánchez, presentaron una nueva evaluación sobre los recursos en el golfo de México que duplicaba las cifras que PEP había presentado un año antes3. En 2001 y 2002, el Maestro Alfredo Guzmán elaboró trabajos precisando las localizaciones y oportunidades exploratorias. Una de sus ponencias comprendía mapas ubicando la impresionante cifra de 2 mil 462 "oportunidades exploratorias"4. En ese mismo año (2002), PEP formuló una definición propia de esos recursos evaluados, a la que la llamó "recursos prospectivos": "la cantidad de hidrocarburos evaluada, a una fecha dada, de acumulaciones que todavía no se descubren pero que han sido inferidas, y que se estima pueden ser recuperables"5. Más adelante, a propósito del anuncio de nuevas evaluaciones que veremos unas líneas adelante, Pemex añadió: "al día de hoy si bien no se han descubierto reservas de hidrocarburos, es decir, no se han perforado pozos exploratorios asociados a estructuras geológicas identificadas, si se ha reconocido un potencial importante. La mayor parte de este potencial, también llamado recurso prospectivo, se encontraría en el golfo de México profundo. Esta estimación surge a partir de la identificación de varias oportunidades exploratorias reconocidas con la información disponible, y otras adicionales inferidas, a partir de la misma información, y a través de la formulación de diferentes hipótesis geológicas derivadas de estudios realizados en el área"6. En 2003, el ingeniero Adán Oviedo, primer coordinador de exploración petrolera en el sexenio de Vicente Fox, adelantó un número más elevado de localizaciones, explicando que "el gran potencial de recursos de hidrocarburos aún por cuantificar y el inventario exploratorio que constituye una oportunidad histórica para el país", señaló 2 mil 700 oportunidades exploratorias de gas y de aceite ligero y pesado". Oviedo concluyó que "México cuenta con un gran potencial de recursos de hidrocarburos"7 y, ese mismo año, Pemex publicó la primera cifra oficial de los recursos prospectivos de México: 20 mil 137 millones de barriles de petróleo crudo equivalente8.

Finalmente, en 2004, en vísperas del IV informe presidencial, Luis Ramírez Corzo presentó la que constituye la más reciente evaluación de Pemex: 54 mil millones de barriles de crudo equivalente. El anuncio tuvo, incluso, una breve mención en el Informe del Presidente Fox, leído el 1 de septiembre de ese año. Esta simple relación nos muestra la rapidez con la que se están presentando los cambios en las evaluaciones, muestra que estamos ante un proceso que apenas se inicia y que podemos esperar importantes modificaciones en el futuro, aunque debe precisarse que, dependiendo del resultado de las perforaciones que se realicen, pueden presentarse ajustes a la baja o evaluaciones aún más altas.

La última cifra difundida por el actual director de Pemex, igual que las que resultaron de las revisiones de las reservas, ha suscitado polémicas y, debe decirse, la misma información oficial no estuvo exenta de ambigüedades, la versión más completa, fue publicada por la revista Explorer, órgano de la American Asociation of Petroleum Geologist de Estados Unidos; repetimos, 54 mil millones de barriles de petróleo crudo equivalente (PCE)9. Las reservas expresadas como crudo equivalente son un agregado de crudo, gas seco y condensados. Hemos realizando algunas operaciones elementales para obtener las cifras separadas10, el siguiente cuadro muestra las cifras desagregadas (cuadro 1).

 

Cuadro 1

Última evaluación oficial de los recursos prospectivos de México

(Millones de barriles)

Componentes
Crudo equivalente
Desglosado
Crudo
34,500
34,500
Gas seco
15,200
79 billones de pies cúbicos
Líquidos del gas
4,300
4,300
Crudo equivalente
54,000
---
Elaboración con los factores de equivalencia de Pemex.

 

Expectativas de la producción de México

Estas estimaciones, que comprenden sobre todo los recursos de las aguas profundas del golfo de México, apoyan las perspectivas que sobre la futura producción petrolera de México se contemplan en el extranjero y en el propio Pemex. El Departamento de Energía de Estados Unidos (DOE), partiendo de su perspectiva, que ya considera casi borradas las fronteras, sostiene que: "en América del Norte se espera que la moderada declinación de la producción de Estados Unidos, sea compensada por un incremento significativo de la producción de Canadá y México11".

"Respecto a México se espera la adopción de una política energética que impulse el desarrollo eficiente de sus vastos recursos. La producción esperada de México excederá los 4.2 millones de barriles diarios en 2010 y se espera que los incrementos continúen en otro medio millón de barriles diarios (b. d.) hacia el final del periodo proyectado, es decir 202512.

Igual o mayor optimismo existe en Pemex. Su actual director, Luis Ramírez Corzo, desde comienzo del sexenio ha venido proponiendo elevar la producción de crudo en México. Si el DOE espera que la producción de México, en 2010, ascenderá a 4.2 millones de barriles diarios y que podría aumentar otro medio millón de b.d, para alcanzar en total 4.7 millones de b. d., Ramírez Corzo planteó la viabilidad de alcanzar 5 millones y medio de barriles diarios para 2010; además consideró, que disponemos de "un potencial de producción sustancialmente mayor en crudo y gas para el largo plazo"13. Es muy importante destacar que las expectativas de elevar la producción no solamente las ha expuesto el actual director de Pemex, también las encontramos en estudios prospectivos formulados por Pemex y la Secretaría de Hacienda. Sin incluir proyecciones de producción o, mejor, sin precisar las cifras de nueva producción esperada, pero igualmente enfática sobre las posibilidades de elevar la producción, la SHCP también ha estado defendiendo estas posibilidades en las discusiones sobre la reforma fiscal de Pemex. Desde luego, debe aclararse que todas estas propuestas plantean como condición la apertura al capital extranjero. El cuadro 2 presenta la producción esperada de nuevos campos por descubrir entre 2004 y 2011; adviértase que se esperaba alcanzar medio millón de barriles diarios, sólo de nuevos campos, para 2006, y un millón de barriles diarios para 2010. La producción acumulada sólo de los nuevos campos sería de mil 500 millones de barriles, equivalente a tres campos gigantes.

Cuadro 2
Producción esperada por la SHCP de nuevos campos por descubrir, 2004-2011
Año
Barriles diarios (en barriles)
Anuales (en millones de barriles)
2004
50,000
18.25
2005
250,000
91.25
2006
500,000
182.50
2007
550,000
200.75
2008
650,000
237.25
2009
850,000
310.25
2010
1,000,000
365.00
Acumulado
 
1,405.25
Fuente: Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Análisis del mercado de hidrocarburos, Subsecretaría de Egresos, SHCP, México, 2002.

 

Como hemos visto, Pemex ha realizado, utilizando sus recursos humanos y sus propios laboratorios, la evaluación de las posibilidades petroleras en el golfo de México. Ciertamente, como toda empresa petrolera, una buena cantidad de la investigación la han realizado empresas especializadas, vendedoras de estos servicios, contratadas por Pemex para una actividad específica, en un espacio y plazos determinados y a precios fijados de antemano.

Hasta aquí nos hemos situado en la rama de la exploración que emplea determinadas herramientas que permiten formular evaluaciones sin necesidad de perforar. Como dijimos, algunos partidarios de la privatización sostienen que Pemex está incapacitado para perforar en aguas profundas. Lo primero que tiene que decirse a quienes formulan esas aseveraciones es que desde hace más de diez años, en 1993, Pemex perforó su primer pozo en aguas profundas del golfo de México. Fue llamado "Ayín" y se perforó en un tirante de unos 180 metros; más tarde, en 1998, se perforó un segundo pozo en el mismo campo, llamado "Ayín" delimitador, número 2, que alcanzó 192 metros; en 1999, Pemex logró la perforación de "Tabscoob-1", en 194 metros y, en 2000, perforó "Chuc-ktah", en 384 metros de tirante de agua. Debo aclarar que no existe ninguna convención internacional para establecer el límite de las profundidades de las "aguas profundas". En Pemex y el IMP se llamaba así a las situadas a más de 200 metros; igual lo hacían otras instituciones internacionales. Los noruegos llaman aguas profundas a las situadas a más de 300 metros. Pues bien, en el Pemex de Fox se empezó a denominar aguas profundas a las ubicadas arriba de 500 metros. Con este cambio lograban presentar a Pemex, como una petrolera que, no obstante sus avances, aún no había logrado incursionar en el golfo profundo, pero el mito se ha derrumbado: apenas el año pasado, Pemex perforó el pozo "Nab" a 681 metros de tirante de agua y actualmente se encuentran en desarrollo cinco perforaciones más.

Los detractores de Pemex persisten en su campaña asegurando que lo que no puede hacer es explotar los hidrocarburos en las aguas profundas, lo que también es falso. Apenas en la navidad de 2003, con el voto unánime de todos los partidos, la Cámara de Diputados aprobó los presupuestos de varios proyectos petroleros ?sinceramente, dudamos que los diputados hayan estudiado cada uno de ellos, pero aquí les informamos que entre los proyectos de Pemex, actualmente en desarrollo se encuentran varios? en aguas profundas; uno de ellos es, precisamente, el ya mencionado campo Ayín. Los detalles de esos proyectos se encuentran disponibles en los bancos de datos sobre la industria petrolera del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM.

Entre quienes insisten en la incapacidad de Pemex se encuentran, sobre todo, las empresas extranjeras: apenas en febrero de este año se celebró en Veracruz la IV Conferencia Sobre Tecnología Petrolera; allí, el mismo vicepresidente de la British Petroleum (BP), Chris Sladen, y otro individuo presentaron una ponencia en la que señalan que México podría estar dentro de los países que desarrollarán actividades en aguas profundas, junto con otros del noroeste de Africa, Trinidad, India, Vietnam, China, Nueva Zelandia y Rusia, pero "no debe perder de vista que tendrá que competir con esos países para atraer inversiones", por lo que "habrá que ser un país competitivo que resultara atractivo" (sic) y termina diciendo el inglés que "de lo contrario, el pronóstico de éxito podría ser muy bajo"14.

En conclusión, Pemex ha logrado evaluar el potencial en aguas profundas y perforar pozos en tirantes de más de 600 metros, por lo que, además de fortalecer sus presupuestos de investigación tecnológica, puede seguir comprando los servicios de los que carezca, adicionalmente, celebrando convenios que le permitan adiestrar a su personal en el manejo de nuevas herramientas. La experiencia de los técnicos mexicanos permite afirmar que México no tiene necesidad de compartir la renta petrolera como proponen las tendencias privatizadoras en el gobierno de Fox y las empresas extranjeras.

 

* Investigador del Instituto de Investigaciones Económicas, Universidad Nacional Autónoma de México. Comentarios a: fabiobarbosa_cano@hotmail.com

1 Pablo Cruz-Helú y Javier Meneses, "Pemex plots ambitious E&D spending increase", adapted from a talk given at the AAPG Annual Convention in Salt Lake City, del 17 al 20 de mayo de 1998, Oil and Gas Journal, 15 de junio de 1998.

2 Véase una amplia reseña en: Fabio Barbosa, El petróleo en los hoyos de Dona y otras áreas desconocidas del golfo de México, México, UNAM-Porrua, 2003.

3 Rafael Navarro, Jorge Nieto y Antonio Sánchez, "Deep Water in Mexico. An Overview", Paper presented in the 5th Annual Deepwater Technologies & Developments", Houston, Texas, 14 de septiembre de 2000.

4 Alfredo Guzmán, "Exploration and Production in Mexico: Challenges and Opportunities", Adaptation of presentation to Houston Geological Society and AAPG Convention, Houston, Texas, 28 de agosto de 2001, "The Petroleum Geology of Mexico, Past, Present and Future", Adaptation of presentation to AAPG Annual Meeting, Houston, Texas, del 10 al 13 de marzo de 2002.

5 PEP, Las Reservas de hidrocarburos de México. Evaluación al 1 de enero de 2004, México, Pemex, 2004.

6 Pemex, "Evaluación de recursos prospectivos", Boletín, 2 de septiembre de 2004 (www.pemex.com)

7 Conferencia Magistral del ingeniero Adán Oviedo Pérez, Subdirector de la Coordinación Técnica de Exploración de PEP, en el "Primer Seminario Internacional Prácticas Ambientales en las Actividades de Exploración y Producción Costa Afuera", Boletín, 24, abril de 2003 (www.pemex.com)

8 Raúl Muñoz Leos, "Informe 18 de marzo de 2003", México, 18 de marzo de 2003.

9 Véase "Meanwhile Geology Beckons. Politics cloud Mexico?s promises", Explorer, AAPG, octubre de 2004. La noción petróleo crudo equivalente es una unidad de medida que permite expresar en un solo agregado los tres componentes de las reservas de hidrocarburos: crudo, líquidos del gas y gas seco. El factor de equivalencia utilizado actualmente en Pemex es 5.201 millares de pies cúbicos de gas por un barril de crudo equivalente. El factor de equivalencia fue modificado en el actual sexenio. En el pasado el valor era 5 000 pies cúbicos de gas por un barril de crudo equivalente.

10 Para determinar la estructura de las reservas de hidrocarburos de México pueden utili-zarse las cifras de la última evaluación de Pemex, que presenta la desventaja de cifras sesgadas hacía la Sonda de Campeche; para evitar el sesgo hemos utilizado las cifras de las últimas evaluaciones de US Geological Survey que ofrece la ventaja de basarse en las nuevas áreas del golfo de México.

11 DOE/Energy Information Administration, "International Energy Outlook, 2004" (www.eia.doe.gov.)

12 O. c. (Las cursivas son nuestras).

13 La primera versión de estos planteamientos se realizó en su disertación de ingreso a la Academia Mexicana de Ingeniería; posteriormente fue publicada con algunas modificaciones en: Luis Ramírez Corzo, Retos y oportunidades de la exploración y producción de hidrocarburos en México. Una nueva visión del sector, Pemex, México, 2002. Aumentar la producción de crudo, según esa propuesta implicaría incrementos de alrededor de 400 mil barriles por año de 2005 al 2010; a esta altura del sexenio creemos que ni cambios dramáticos en la inversión podrían conseguirlo, por lo que la consideramos inviable. No la descalificamos, las metas podrían lograrse algunos años más tarde de lo inicialmente proyectado por el actual director de Pemex, pero las expectativas del DOE estarían más cercanas a la situación actual de Pemex. Desde luego, aumentar la extracción para aumentar las exportaciones corresponde a los intereses de EU, al servicio de los cuales están los funcionarios petroleros foxistas.

14 Chris P. Sladen y Alfredo García (BP), "El futuro de la exploración y producción en aguas profundas: México en el contexto del mundo", Ponencia en la IV Exitep, Veracruz, Ver., febrero de 2005.

 



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