Todo tiene su tiempo!
En las luchas diarias de la vida, acuérdese de que todo tiene un tiempo propio para realizarse. El árbol más alto del mundo, un día fue semilla. El mar gigantesco es formado por pequeños ríos que despejan sus aguas en un encuentro marcado. La hora del reloj es formada por segundos que se juntan para formar el minuto. La casa más bella y rica, un día fue sólo proyecto. Así, todo sigue un cronograma y en la Ley Divina nada sigue a los pulos o con privilegios, todo es justicia pura.
Sabiendo que el mundo es construido por etapas, que todo está en su debido lugar y en el debido momento correcto, no abandone sus sueños, no desistas de luchar por su crecimiento. Rehaga sus planes si necesito que sea, ajústelo al momento actual y agarrese con Dios. Crea en su fuerza, pero crea también que usted nunca está solo; en ningún momento los ángeles te abandonaron, tal vez usted no haya dejado que ellos se aproximen, pero ellos siempre estarán cerca de usted.
No se asuste con las actitudes de las personas que te rodean; no siempre ellas están en su mejor día, y todos nosotros tenemos el derecho de que estemos molestos o hasta tristes y sin deseos de hablar con nadie. Por lo tanto, respete el individuo que existe en cada persona; no cree expectativas con la vida de los otros, usted acaba se lastimando y haciendo con que las personas se sientan responsables por actitudes que sólo usted esperaba, que usted ni siquiera comunicó a la persona interesada, sólo deseó en su íntimo.
Todo tiene su tiempo!
Y su tiempo de plantar es todos los días; es cada minuto. Siembre amor, distribuya semillas de cariño y en breve usted irá a tener la mayor cosecha de felicidad que un ser humano puede tener. Nada supera el amor, viejos dolores desaparecen bajo la acción del amor; enemigos se abrazan en nombre del amor; parientes alejados se reencuentran en nombre del amor, y usted será bendecido por el amor que Dios derrama, todos los días, sobre su cabeza en señal de que Él cree en usted, siempre!
Yo creo en usted!!