Acaso el corazón, estallar podría Sol resplandeciente del alma mía Quema mi oscuridad, alienta mi vida Pasión que me eleva, y enaltece
Mis más oscuros bienes Tú sacas lo malo que hay en mi Fuego ardiente es la piel Un solo pensamiento tu mi dueño
Cual es el amor prohibido Cual el fuego ardiente Pasión que devora sin dientes Más colmillos blancos son un tesoro
Entre brumas viajando Solitaria asceta del olvido Peregrinar de tantos halleres Cuanto olvido. Cuanto lo perdido
Te escondes en el silencio Te asomas a placeres Espejo oculto cual valiente Cobarde tienes miedo de quererme
Yo se de tus impulsos Se de latidos presurosos Como fiera agazapada y taciturna Te ocultas entre risas y piropos
Una rosa roja es tu boca Sedienta afiebrada, incitante Seduciente de placeres y quereres Me quemo, me quemas, nos quemamos E imploro, mas fuego como rojo es el vino.
Vino de placeres jamás visto Me enseñas el amor de mil maneras Y creamos nuevas formas de querernos La lámpara del olvido, jamás será encendida Te amo…tesoro mió.