¿Cuantos años he cumplido?, preguntas una vez más,
y yo siempre te respondo con la misma cantinela,
¿para qué quieres saberlo?, eso no debe importarnos,
¡qué más da!,
lo importante son las cosas de la vida que cada día nos da.
Los tiempos buenos vividos son los que deben contar,
la esperanza con que anida en el alma una ilusión,
cuando sonríes a la vida, canta alegre el corazón
si lo llenas de entusiasmo esperanza paz y amor.
Cuando amas a tu vecino, el que camina a tu lado,
procura vivir en paz, ama por siempre a los pobres,
poniéndoles en sus manos un gran pedazo de pan.
regalándoles sonrisas, amor, solidaridad.
A los niños que en el parque juegan con gran entusiasmo,
abrázalos con ternura salida del corazón para que sigan jugando.
limpia sus pequeñas manos, aunque de tanto jugar,
estén sus caritas sucias, siempre llenitas de barro.
Cuida bien de tu familia, regala paz y armonía,
ese será el rico pan que comerán día tras día.
mírales siempre de frente, y les regalas sonrisas,
serás bálsamo en su alma cuando les hables sin prisas.
Cuando mires a tus hijos, sé positivo con ellos,
endúlzales con la miel que llevas prendida al pecho.
acaríciales con mimo, pon la sonrisa en tu boca,
que sientan al levantarse ese amor que te desborda.
Así se cumplen los años, regalando mucho amor,
a los niños y mayores, a los ricos y a los pobres,
acariciando sus manos, con palabras amorosas
desbordantes de ternura, de belleza e ilusión.
Y ahora, ¿te importan los años que yo he podido cumplir?,
si quieres amigo mío yo te lo puedo decir,
pero son formalidades para llenar un papel,
lo importante es el sentimiento que heredamos al nacer.
Chelo Álvarez
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