Consejo de los Ángeles: El espíritu se expresa en el color
de la vida
A veces la vida pierde color y es como un día nublado. ¿Dónde
quedan el entusiasmo y la energía? Sin embargo, en esos
días sin color se pueden hacer varias cosas: meternos bajo las
sábanas y no salir hasta que lo haga el sol, mirar por la
ventana y apreciar la belleza del paisaje gris o crear nuestro
propio color, utilizando las pinturas de nuestra luz y nuestra
calidez.
Los ángeles desean que recordemos que el color es relativo y
que los días nublados pueden aprovecharse para descansar
del exceso de luz y actividad. Cuando las cosas parecen
descoloridas y deprimentes, los ángeles nos animan a dejar que
el gris haga su propio milagro y nos dé tiempo para reflexionar.
Cuando aprendamos a distinguir lo que nos aburre o nos
entristece, podremos empezar a añadir breves toques
de colores atrevidos y creativos a nuestro día.
Cuando la vida pierda color, imagínala como la tela blanca
de un cuadro que está pidiendo a gritos que la pintes. Tú eres
el artista. Comienza a colorearla, poco a poco, con tonos que
representen distintos aspectos de ti mismo. A cada color le corresponde
un significado psicológico y espiritual, por ejemplo,
el rojo simboliza el fuego, la pasión y la creatividad; el amarillo,
el intelecto, la fe y la alegría; el verde, la salud y la vinculación
con lo natural, etc.
Es interesante observar cuáles son los colores que más nos
gustan, porque pueden indicar tanto nuestras necesidades
como las fuerzas de nuestra alma y nuestro espíritu.
Meditación de los Ángeles: Dejo que el color entre en mi vida.