El libro de Génesis demuestra y evidencia de una manera irrefutable la existencia de dos Dioses, como si fuera poco también demuestra que el alma es mortal no inmortal, además demuestra que también Dios creó el bien y el mal.
Apoyando la observación y el estudio que el hermano Tito expuso sobre la mentira de la inmortalidad del alma, veamos el pasaje de Gen 2:16-17 y Gen 3:1-5
Observen
GEN 2:16-17
16 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; 17 más del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.
GEN 3:1-5
1 Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho; la cual dijo a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto? 2 Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer; 3 pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis. 4 Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; 5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.
Más claro que el agua, si comían del fruto morirán. Pero miren como la serpiente mesclo la verdad con la mentira, pues Satanás también dice verdades, pero de una manera engañosa y diabólica para hacer confundir y de una vez mentir.
Observen en esos pasajes Satanás astutamente dijo la primera mentira, diciendo algo que IEVE nunca dijo, pues dijo: “Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto”?, ¿IEVE dijo eso? Pues NO. IEVE dijo: “De todo árbol del huerto podrás comer; 17 más del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás;…”
Vean como Satanás engaño a Eva diciéndole algo que nunca dijo IEVE.
La segunda mentira mesclada con la verdad
Veamos como Satanás le dijo a Eva: No moriréis; 5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.
Aquí vemos una verdad, porque si Adán y Eva comían de esa fruta iban a conocer el también la maldad, el bien y el mal. Una vez comieron tuvieron el conocimiento del bien y el mal un conocimiento que IEVE tenía mucho antes de la creación del hombre, miren el siguiente pasaje de GEN 3:22 22 “Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal;…”
Por lo tanto se entiende fácil de que creó el mal, que es la adversidad, y la pregunta es ¿quién es nuestro adversario?, Pues Satanás.
Comparar con
ISAÍAS 45:7 – Que formo la luz, y creo las tinieblas; que hago la paz y que creo el mal. Yo soy IEVE, que hago todo esto.
IEVE quito el árbol para que no vivieran, fue justicia
22 Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre. 23 Y lo sacó Jehová del huerto del Edén, para que labrase la tierra de que fue tomado. 24 Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.
Vemos como IEVE quito del huerto el árbol de la vida, porque se entiende que como ya tanto como Adán y Eva tenían el conocimiento del bien y del mal pues fácilmente ellos podrían ir a comer del fruto y vivir, pues justamente IEVE lo quito por su desobediencia, y cumplir con su palabra de que morirían si comían del árbol del bien y del mal.
Fíjense que la misma mentira astuta que Satanás le dijo a Eva que no morirían si comían de la fruta del bien y del mal, es la misma mentira que los maestros de las iglesias apostatas enseñan, que una vez morimos nuestra al mal es inmortal, no morimos, lo contrario a lo que dijo IEVE, que una vez que comieran del árbol morirían. Por lo tanto la inmortalidad del Alma es una mentira Satánica un engaño por parte de Satanás que surge desde la creación del hombre y la mujer, que casualidad que es la primera mentira que Satanás le dijo a Eva.
Perdonen, por no soy bueno haciendo estudios, pero si hay que corregir algo se corrige, si hay algo que añadir también.
Bendiciones hermanos. Que sea de edificación.