TENER ESPÍRITU NO ES SER UN ESPÍRITU
Por Tito Martínez
Mirad, observad cuan falso es lo que enseñan en el sistema iglesiero apostata, el SIA, cuando enseñan esa mentira diabólica de que los seres humanos somos espíritus, seré lo más claro posible:
1- En el SIA citan 1Juan 4:1-2 para hacernos creer que los seres humanos somos espíritus, pero lo que dice ese pasaje es que debemos probar a los espíritus si son de Dios. Esto no significa que los seres humanos seamos espíritus, sino que hay espíritus engañadores QUE HABLAN POR MEDIO DE ESOS SERES HUMANOS, tal como dijo Pablo en este otro pasaje:
1Ti 4:1 Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios;
Esos espíritus engañadores no son las personas, sino los espíritus inmundos que hablan y enseñan mentiras doctrinales a través de esas personas, vamos a comprobarlo:
Mar 1:23 Pero había en la sinagoga de ellos un hombre con espíritu inmundo, que dio voces,
Mar 1:24 diciendo: ¡Ah! ¿qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos? Sé quién eres, el Santo de Dios.
Mar 1:25 Pero Jesús le reprendió, diciendo: ¡Cállate, y sal de él!
Mar 1:26 Y el espíritu inmundo, sacudiéndole con violencia, y clamando a gran voz, salió de él.
Como podeis ver, hay espíritus inmundos que entran en los cuerpos de ciertas personas malvadas, y esos espíritus inmundos HABLAN y enseñan doctrinas de demonios, por eso es que Pablo dijo que probemos a los espíritus si son de Dios, pero esto de ninguna manera significa que los seres humanos seamos espíritus, ya que Jesús dijo bien claro que un espíritu NO TIENE CARNE NI HUESOS (Lc.24:39), y como nosotros tenemos carne y huesos, por tanto no somos espíritus. Cuando el SIA enseña que somos espíritus no solo están mintiendo descaradamente, sino, lo que es peor, están llamando embustero al propio Señor Jesús, el cual dijo que un espíritu no tiene carne ni huesos.
2- El SIA suele citar 1Tesalonicenses 5:23 para hacernos creer que nosotros los humanos somos espíritu, alma y cuerpo. Sin embargo, ese pasaje no dice por ninguna parte que seamos espíritu, alma y cuerpo, sino que TENEMOS espíritu, alma y cuerpo, o dicho en otras palabras, el ser humano está integrado por espíritu (el aliento de vida), el alma (la vida o nefesh) y el cuerpo físico, pero ese pasaje de Pablo no dice por ninguna parte que nosotros seamos espíritus, ya que ¡¡si fuéramos espíritus entonces no tendríamos un cuerpo de carne y huesos!!. Sencillamente el SIA confunde tener espíritu (aliento de vida) con ser un espíritu, cuando son dos cosas totalmente diferentes.
3- Y respecto al pasaje de Eclesiastés, el SIA tampoco lo entiende, sino que lo deforma, veamos lo que dice el pasaje:
Ecl 3:21 ¿Quién sabe que el espíritu de los hijos de los hombres sube arriba, y que el espíritu del animal desciende abajo a la tierra?
El texto no dice por ninguna parte que el hombre sea un espíritu, sino que TENEMOS espíritu, es decir, tenemos ese aliento de vida o energía que nos da la vida. Si ese pasaje dijera que el ser humano es un espíritu, ¡¡entonces también estaría diciendo que los animales son espíritus!!, ya que el texto también menciona el espíritu o aliento de vida de los animales, sin embargo, ¡¡es obvio que los animales no son espíritus!!.
Cuando los seres humanos morimos, esa energía de vida (espíritu) que tenemos los humanos sube arriba, y regresa a Dios que la dio (Ecle.12:7), y cuando los animalitos mueren, esa energía o espíritu que ellos tienen no regresa a Dios que la dio, sino que desciende a la tierra.
En fin, esa doctrina del SIA de que los seres humanos somos espíritus es una burda mentira totalmente antibiblica. Los seres humanos TENEMOS espíritu, es decir, tenemos esa energía de vida que Dios puso en nosotros, y que hace que podamos pensar, hablar o movernos, y en ciertos seres humanos que se dejan influenciar por Satanás también se pueden meter en sus cuerpos y en sus mentes espíritus engañadores e inmundos, los cuales hablan y enseñan doctrinas de demonios, y por medio de esas doctrinas de demonios engañan a personas ignorantes de la Biblia y de la verdadera doctrina.
(El tormento de los malditos judaizantes y demás apóstatas de la fe)