Las vacas “azul belga”: Otra mutación perjudicial - CONGREGACION CRISTIANA BIBLICA

La sabiduría del Señor a la hora de haber diseñado y creado a los animales se aprecia en cualquier leve mutación o copia errónea de ADN que degenera en una grave enfermedad para todos los seres vivos, lo cual es una ley, repito. Es una ley demostrada que las mutaciones producen solo y tan solo enfermedades, una mutación es como dar un martillazo a un reloj de cuerda, de los de antes, con complejos engranajes, a lo que hay que añadir que es una hipótesis afirmar que las mutaciones producen mejoras en los seres vivos, eso solo se ve en los comics de X-men,- pura propaganda evolucionista-. Los evolucionistas quieren vendernos a las vacas “azul belga” como una mutación negativa, pero que genera algo positivo, que genera vacas más con más carne y más músculo, por tanto aparentemente mejores para el consumo humano. Esta alteración es dada en el gen de la miostatina, el cual codifica una proteína que actúa para inhibir el crecimiento muscular, lo que provocan que estas vacas padezcan una doble musculatura.

Uno de los principales problemas a los que se enfrenta esta mutación asilada y todas es que el cuerpo de los seres vivos es un sistema complejo, por tanto para que esta mutación llegase a buen puerto, debería haber otra mutación que aumentase la densidad ósea, ya que a mayor masa muscular, se requiere una musculatura acorde a esa masa, si no al más mínimo movimiento inadecuado, como apoyar mal una pata, se partiría un hueso. También debería haber otra mutación para aumentar la masa de los cartílagos que unen el músculo con los huesos, para evitar roturas de fibras musculares. En cuanto al sistema coronario, el corazón que es un músculo aumenta de tamaño, ¿pero los vasos sanguíneos?, ¿están preparados los vasos sanguíneos para transportar la sangre con los latidos de un corazón hipertrofiado?.

Esto es lo que publica La Razón al respecto:

Citación:

Este ganado es susceptible a muchas complicaciones médicas. Algunos de los problemas atribuidos implican macroglosia, lo que provoca una hinchazón de la lengua, que también pueden interferir con la capacidad de un ternero para amamantar y causar la muerte prematura.
Entre otros problemas, se suma la rigidez articular congénita, una enfermedad crónica que afecta la capacidad de un ternero para ponerse de pie sobre sus patas; problemas cardiorespiratorios y distocia: complicación que hace que requieran cesáreas para parir, debiendo las madres ser sometidas a un mayor sufirmiento. ¿Hasta dónde llegaremos? Nadie sabe…