La OTAN ha tomado sus primeras medidas de represalia contra la "violación por parte de Rusia de laintegridad territorial y soberana de Ucrania" con la suspensión de las misiones conjuntas que la Alianza desarrolla con Moscú, entre ellas la escolta marítima del buque estadounidense 'Cape Ray' que neutralizará parte del arsenal químico sirio.
El secretario general de la Alianza Atlántica, Anders Fogh Rasmussen, ha hecho este anuncio tras la celebración de una nueva cumbre en el cuartel general, donde han participado representantes de Rusia.
El político danés, que afronta esta crisis en la recta final de su mandato, ha resaltado que esta decisión no afectará al programa de destrucción de armamento químico de Siria, pero sí dejará al margen la participación de Rusia en el proceso. Así mismo, a partir de este momento la OTAN ha decidido suspender las reuniones militares previstas con Moscú.
"Hemos dejado bajo revisión toda nuestra cooperación con Rusia", ha subrayado Rasmussen. Se trata de un"claro mensaje" de que las acciones que está llevando a cabo el Kremlin no van a quedar impunes. Aun así la decisión adoptada está pendiente de la ratificación por parte de los ministros de los 28 países aliados en una próxima reunión que se celebrará en abril.
La respuesta de la OTAN se produce tras varias reuniones extraordinarias convocadas a raíz de la ocupación de Rusia en Crimea. El martes los aliados tuvieron un encuentro a petición de Polonia, que invocó el artículo 4 del Tratado, que establece que un Estado miembro puede llamar al resto a consultas si siente amenazada la integridad de su territorio o su seguridad.
Las decisiones adoptadas son las primeras medidas contra Rusia que adoptan los aliados, a la espera de saber mañana si los jefes de Estado y de Gobierno de la UE aprueban sanciones contra Moscú.
Según el líder civil de la OTAN, los principios fundamentales que rigen la relación entre los aliados y Rusia están ahora puestos en duda. "Es necesario que ambos cumplamos nuestras obligaciones en plenorespeto a la ley internacional y cumpliendo nuestro compromiso de no usar la fuerza uno contra el otro", ha leído en un comunicado Rasmussen.
Al mismo tiempo que se suspenden las relaciones con Rusia, la Alianza Atlántica ha decidido reforzar la cooperación con Ucrania y apoyar el proceso de regeneración democrática. "Reforzaremos nuestros esfuerzos para construir una capacidad militar en Ucrania y para ello prestaremos ayuda en el entrenamiento de las tropas", ha anunciado.
Volver a la 'Guerra Fría'
El enviado ruso ante la OTAN acusó a la Alianza de imponer un doble rasero y de aplicar estándares la Guerra Fría a Moscú.
"Esta reunión demostró que la OTAN todavía tiene una política de doble rasero. Los estereotipos de la Guerra Fría todavía se aplican con respecto a Rusia," dijo Alexander Grushko a los periodistas después de una reunión de la OTAN para discutir la crisis de Ucrania.