UNA NUEVA POLÍTICA: EL BIEN COMÚN
Todos sabemos que desde la época de los Césares hasta la fecha la política ha sido en muchos casos -por no decir siempre- una conspiración, una especulación que, por mejores intenciones que haya tenido, siempre estuvo al servicio de intereses personales y/o sectoriales. En política no hay sentimientos en juego, hay intereses.
Una prueba de ello es la dolorosa experiencia de “Irak”. No fue una conspiración muy cuidada, pienso que subestimaron la capacidad de toda la humanidad de reconocer la verdad de la mentira... Para los conspiradores podemos resultar necios o sometidos. Lo importante es que creemos nosotros que somos y que nos pasa con eso, qué hacemos.
La conspiración puede ser de blancos contra negros, árabes contra judíos, del poder económico contra el estado, contra el pueblo, o de los políticos contra el pueblo, o de un hermano contra otro hermano por apropiación de bienes familiares.
La conspiración es siempre lo que no se dice, es la verdad oculta debajo de manipulaciones políticas. Esto existe y existió en familias Reales o familias “como las de uno”, en la Iglesia y en otras instituciones. Se trata de un “virus psicológico instalado”: La ambición de poder que controla y nos controla, que sirve al dios del miedo y pasa de generación en generación. La conspiración es tan vieja como el mundo y no tiene nada que ver con el Amor, y el Bien Común, tiene que ver con el miedo y el miedo tiene muchas máscaras, una de ellas es la avaricia que es el miedo a no tener, y a la muerte. ¿Será por eso que los poderosos miran con simpatía la clonación, y todas esas manipulaciones genéticas.?
Pero volvamos al plano social. Con el auge de la comunicación, mucho ha cambiado, como dice el filósofo José Pablo Feinmann en su artículo de la Nación del sábado 21/2/07: ”Cuando subo a un taxi y el taxista dice las dos primeras palabras, sé cuáles van a ser las veinte siguientes, porque no está hablando él está hablando Radio 10. Lacan y Derrida dicen que el hombre no domina el lenguaje, sino que el lenguaje lo domina a él. La gente no tiene opiniones, opina lo que opina el poder”. Lapidario, demasiado definitivo para mi gusto, no toda la gente está dominada por los medios de comunicación.
Pero lo que sí es cierto, es que estamos absolutamente bombardeados por información “transgénica ”, modificada o creada para alterar la realidad y nuestra naturaleza interna. Con lo cuál nuestra participación en las decisiones políticas es condicionada y limitada. Creer todo lo que una ve o escucha, adormece, elimina el poder creativo de la duda.. La duda abre la posibilidad de investigar.. ¿Que pasaría si seleccionamos el modo de informarnos,? Mi experiencia es que cambia nuestra visión, nuestro estado de conciencia. Tanto la TV como la radio y las diarios, tienen la función de implantar ideas.. pero leer los diarios da una opción: cada uno puede elegir sobre que se quiere informar, y permite pensar, evaluar.
En mi opinión la democracia es hoy solo una palabra para definir una forma aceptada, el “status quo”, que ha quedado vacía de contenido. Una cáscara que en cualquier momento se rompe. Los medios de comunicación son hoy el poder y están en manos del poder económico, que sigue creando hambre... Hoy se puede librar una guerra “mediática” sin que se dispare un solo tiro, pero igual puede causar víctimas.
Para interpretar lo que sucede habría que ser un estudioso de la economía, la política, de las actitudes, de los hechos, de las filosofías de vida de los que mueven los hilos del poder. Es en las creencias donde está alojado el virus psicológico de la ambición de poder político-económico. El capitalismo no es “el malo”, son los hombres y sus sistemas de ideas los responsables del hambre en el mundo. Es un problema de distribución de la riqueza.. Lo que produce el daño es la creencia de que todos estamos separados y que puedo actuar sin escrúpulos sin que eso me afecte... Lo que va vuelve, en este caso como delincuencia, droga, secuestros, atentados. Pero el hombre común no dispone de tiempo para jugar al psicólogo, al sociólogo o al metafísico... El hombre común tiene como herramienta sus manos el hacer, y como guía el sentido común, y esto es un lugar de poder.
Si la política es conspiración y especulación, que nos queda a los ciudadanos comunes? ¿Cuál es la salida ante los males que aquejan a nuestro país, y al mundo. ? Este no es ya un tema nacional, es un tema de globalización del poder político-económico.
A lo mejor peco de idealista pero yo veo una salida, que no es a corto plazo, y es actuar en la periferia de la política de masas instalada. En la periferia de los intereses egoístas. Hay gente en el planeta que se ha dado cuenta de que todos somos Uno, porque la Tierra es una, el medio ambiente es Uno con el hombre y que de seguir las cosas como están, no va a quedar ningún humano para disfrutar del oro, o de lo que haya acumulado para sobre-vivir, a costa de la vida de otros.
Estoy hablando del El Foro Social Mundial realizado en Bombay. Es la reunión de seres humanos en búsqueda del Bien Común, del Bien Común Global. Es una nueva forma política, una nueva Conciencia Planetaria, incipiente, creativa y lleva adentro la semilla del sentido común, y el sentir común de la mayoría de los seres humanos del planeta: Paz, pan y trabajo. La dignidad del hombre. Son personas ordinarias, no son especiales, pero son diferentes; la madurez de experimentar la unidad en la diversidad, hace la diferencia.
Los seres comunes tenemos poder y no lo usamos... Es lamentable pero a veces preferimos sentarnos a mirar TV a escuchar opiniones de sectores a los que no pertenecemos, que lo único que hacen es adormecer Nuestra Conciencia del Bien Común y seguir en la vieja historia de que “el gobierno, la sociedad, (mi padre, mi madre) tienen que solucionarme el problema”. El mensaje contradictorio de los medios es: Participa, pero no cambies nada. El cambio es peligroso, y cuando estamos desprevenidos: ¡¡Zás!! Vino el cambio, pero no es para el Bien Común sino para beneficio de los dueños de los medios.
El Bien Común no le pertenece a nadie, no es un partido político, es de Todos Nosotros. El Bien Común es ética y servicio desinteresado. Es amor en acción. Lo encontramos en las redes solidarias y en los gestos solidarios del hombre común. Y no necesariamente tenemos que pertenecer a un grupo para realizarlo. En nuestro cuerpo todos los órganos cumplen distintas funciones interdependientes. Pero dentro de cada célula hay una Conciencia, una Inteligencia Superior, la misma que reina en el planeta y que sostiene la vida. Cada órgano en el cuerpo “habla”, se expresa diferente de acuerdo a su función, pero todos trabajan unidos en esa diversidad de funciones, unidos para un mismo fin: Sostener la vida. En esta metáfora, La Tierra es el cuerpo y nosotros los órganos. Somos las manos de la Pachamama. Las manos son el símbolo de la creatividad y están hechas para dar y recibir. Solo hay que ponerlas al servicio del mayor bien para todos.
Por eso todos, sin distinción de razas, ni credos, ni ideas políticas o filosóficas, podemos trabajar unidos en la diversidad. No hay más tiempo para esperar la coincidencia total y perfecta para poder actuar. Eso no existe. Como no existen hermanos que coincidan en todo. La tolerancia y la aceptación, la flexibilidad y la comunicación son la clave: Si amamos la vida podemos hacer algo por la vida. El sentido último de la vida es aprender a amar y estamos siendo convocados a aprender y manifestar ese amor. Hay sufrimiento en el planeta y hay sufrimiento en muchos de nosotros... No quedan ya alternativas, es el Amor o el miedo al cambio y a la Vida.
ANY BOTINDARI