Bueno, con el deber de votar cumplido, aqui estoy de nuevo.
Fué como siempre en mi país, una jornada tranquila y alegre. En ese sentido se puede estar orgulloso en este lugarcito del continente.
Tengo una peculiar forma de ver todo lo referente a la política, a mis años ya como que vengo de vuelta. Por eso me desintereso mucho en esto, creo que nada hay en ningún lugar del mundo que de alguna forma no esté dentro de lo que yo suelo llamar un juego de ajedréz. Y ya se sabe quienes son los reyes y cuales los peones en él.
Me dá pena ver como se dirige a las masas. Como y hasta donde una persona puede ser cínica y montar todo un show para llevar a la gente a su redil. Como otras se asocian en este acto teniendo en cuenta incluso sus intereses personales. Como se usan términos como bandera y patria (solo faltaría dios) para azusarlas y enardecerlas. Bueno eso es política no?
Como que uno queda asqueado de tanta mentira desvergonazada, porque los que tenemos algunos años, aún tenemos en nuestra memoria las fechorías que han cometido.
Algunos hacen oídos sordos, a otros les conviene, y otros son muy jóvenes para saber. Lo malo que todos votan!
Y votan sin verdadero conocimiento de causa, alegremente, sin responsabilidad alguna. Historias de ahora y de antes tengo muchas!
Desde el "voté al que tenía la sonrisa mas linda" hasta "voté al que me pareció ser ganador porque no me gusta estar en el bando de los perdedores!"
Para mi en lo personal, es aquí en la política, en donde se ven las bajezas mas grandes de los seres humanos. Es aquí en donde se ve también como algunos dirigentes honestos ( que por suerte hay) se sienten impotentes, con las manos atadas para poder hacer lo que un pueblo en realidad necesita. Es en donde se ve con mas claridad las diferencias de clase, de cultura, y por ende las diferencias de posibilidades.
Y sobre todas las cosas, se ve lo mas triste de nuestra realidad, andamos por la vida sin preocuparnos en saber, en cuestionarnos, en averiguar si lo que nos dicen es cierto. Hoy cuando es mas fácil que nunca debido a la tecnología, el hacerlo. Pero no hay peor sordo que el que no quiere oir, ni peor ciego que el que no quiere ver. Lamentablemente pagamos justos por pecadores porque en una votación se juega nuestro propio destino y el de los hijos.
Pero siempre hay que colaborar con el granito de arena pensando en hacer lo mejor para todos (aunque uno se equivoque, o sea al santo botón porque el juego ya esta servido) y poder dormir con la conciencia tranquila.
Por eso voté hoy.
Y quedé bien harta viendo como los seres humanos tiran su humanidad, valga la redundancia, a la mismísima basura.