De todo lo que llevas, tu sonrisa es lo mejor que te sienta.
No es la recompensa lo que eleva el alma, sino es esfuerzo que ha costado esa recompensa.
La talla de tu cuerpo cuenta poco, la de tu cerebro cuenta mucho pero, sobre todo cuenta la de tu corazón.
La vida debe enriquecerse con muchas amistades, ya que la mayor felicidad es amar y ser amado.
Las palabras amables pueden ser cortas y fáciles de decir, pues ellas resuenan hasta el infinito.
No temas a los amigos que te atacan, teme a los amigos que te adulan.
Los grandes éxitos se logran siempre convirtiendo en ventajas las desventajas.
El momento de ser feliz es ahora.
La felicidad no depende de lo que nos pueda pasar, sino de la forma en que percibimos lo que nos ocurre.
Procura hacer esto: encuentra el lado positivo a todo aquello que parezca negativo.
La mitad de la belleza depende del paisaje y la otra mitad del hombre que la mira.
La vida se compone de una secesión de lecciones que deben vivirse para ser comprendidas-
El amor es como el fuego; si no se comunica, se apaga.
Muchas personas se pierden las pequeñas alegrías mientras aguardan la gran felicidad.
El secreto de la vida consiste simplemente en aceptarla tal cual es.
El amor cura tanto al que da como al que recibe.
Sabemos lo que somos, pero ignoramos lo que podríamos haber sido.
Nuestras vidas siempre estarán colmadas si nuestros corazones dan a manos llenas.
Si te caes en tu primer intento, Levántate e inténtalo nuevamente. No le eches la culpa a otros. Enfréntate a tus fracasos y decide esforzarte mucho más la próxima vez.
Se tolerante con los demás, incluyéndote a ti mismo. Somos seres humanos aprendiendo a vivir.
Lo que cuenta no es lo que se da, sino el amor con el que se da.
Un ser original es difícil de encontrar, pero fácil de reconocer.
No existe ningún problema humano al que no se le pueda dar solución, ya que esa solución está en cada uno de nosotros.
La tristeza es un muro elevado entre dos jardines.
Cuando uno no halla la tranquilidad en si mismo, es inútil que la busques en otra parte.
Cuando un hombre tiene voluntad y entusiasmo, los dioses son sus aliados.
Las cosas visibles tienen su tiempo, las invisibles son eternas.
El amor comienza cuando una persona siente que las necesidades de otra son tan importantes como las suyas propias.
Si quieres oír cantar a tu alma, haz el silencio a tu alrededor.
Todo el mundo quiere un amigo, pero nadie se ocupa de serlo.
No permitas jamás que alguien llegue a ti sin dejarle ir mejor y más feliz.
El hablar distrae. El callar y obrar recoge y da fuerza al espíritu.
Ayudar en los asuntos de los demás, no quiere decir que debamos meter la nariz en en ellos.
¡Que bello puede ser el día cuando la bondad lo ha iluminado!
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