La muerte anunciada de Gabriel García Márquez
En mayo de 1999 empezó a circular por correo electrónico un poema apócrifo, La marioneta, atribuido a Gabriel García Márquez. En una breve introducción, el texto indicaba que el Nobel lo había enviado a sus amigos a mediados de mayo, al enterarse "de que su grave enfermedad ha recrudecido".
Aunque La marioneta podría ser atractivo para ciertos lectores, su calidad literaria es la de un amateur y no la de un premio Nobel. En tono de despedida especula amargamente sobre las cosas que su autor haría si Dios olvidara que es una marioneta de trapo y "le regalara un trozo de vida". Este hipotético autor declara que no diría todo lo que piensa, pero en definitiva pensaría todo lo que fuera a decir, y luego desarrolla una serie de versos con paradojas sencillas como esa y frases hechas alusivas a la nostalgia y a la esperanza de ser cada vez más humanos. Haciendo honor a su título, el "poema" termina sospechosamente así: "Son tantas cosas las que he podido aprender de ustedes, / pero realmente de mucho no habrán de servir, / porque cuando me guarden dentro de esa maleta, / infelizmente me estaré muriendo". Todo un subproducto de la literatura de autoayuda.
Cuando La marioneta empezó a circular en Internet, García Márquez sufría un constante cansancio. El 24 de junio de 1999 fue recluido en una clínica en Bogotá por un supuesto síndrome de agotamiento general. El 13 de septiembre, médicos de Los Ángeles le diagnosticaron cáncer linfático. Se puso en tratamiento de inmediato y semanas después se anunciaba que su condición había mejorado ostensiblemente.
Cuando se lee el texto, inevitablemente se recuerda el archiconocido poema Instantes, que se atribuye a Borges pero que fue realmente escrito por Nadine Stein o por el caricaturista estadounidense Don Herold, como informa el investigador Iván Almeida en un minucioso estudio sobre el tema.
La marioneta tuvo un relativo éxito en 1999. Aún hay quienes lo envían a sus relacionados creyendo ingenuamente que es "el último poema de García Márquez", ignorando que éste jamás ha publicado poema alguno (de hecho, si alguna vez escribió poesía, la mantiene en secreto). Esto es a lo que se llama en los medios electrónicos un hoax, una falsa información que es distribuida masivamente como verdadera.
¿Cómo pudo La marioneta anunciar los problemas de salud de García Márquez antes del diagnóstico? Es probable que algún íntimo del Nobel hubiera divulgado la especie basado en especulaciones y que por esa vía se haya corrido la voz hasta llegar a oídos de quien creó el hoax.
A finales de mayo de aquel año García Márquez leyó el poema en la edición electrónica de un diario peruano. Ya el hoax tenía vida propia y de poco sirvieron sus aclaraciones. "Lo que me puede matar es que alguien crea que escribí una cosa tan cursi", declaró a la prensa el 31 de mayo.
Es evidente que, en plena masificación comunicacional, es poco lo que las nuevas generaciones leen de los grandes autores. Por ello se explica que tanta gente crea que Instantes es de Borges y La marioneta de García Márquez.
Ahora bien, ¿quién es el verdadero autor de La marioneta? Según el investigador Raúl Trejo Delabre, fue escrito por el ventrílocuo mexicano Johnny Welch, como parte del show de su marioneta "El Mofles". Esto explicaría por qué su autor declara, al final, que "al ser metido en su maleta, infelizmente se estará muriendo".