El azúcar es uno de los más grandes venenos para nuestra salud. Quizás sea el producto que más ha ayudado al deterioro de los hábitos alimenticios y de salud, seguido muy de cerca por las harinas, también refinadas. Es impresionante el volumen de azúcar disponible hoy en el mercado, tan grande como el consumo de ésta por la población. Durante miles de años, los pueblos sólo tuvieron acceso al azúcar de las frutas y semillas y, por supuesto, al de la miel. Estudios antropológicos muestran que ese consumo no representaba más del 3% del total de las calorías consumidas. Hoy las cantidades de calorías consumidas gracias al azúcar pueden fácilmente representar un 50% o muchísimo más. El daño a nuestro organismo es enorme. Pero ¿qué aporta el azúcar?
Hay tres tipos básicos de macronutrientes: carbohidratos, grasas y proteínas:
Carbohidratos
Proteínas
Grasas esenciales
Fuente de energía
Fuente de energía
Fuente de energía
Desarrollo de piel y huesos
Protección de órganos
Transporte de moléculas
Transporte de nutrientes
Presión sanguínea
Temperatura del cuerpo
Balance del ph
Síntesis hormonal
La única función de los carbohidratos es proveer energía. La proteína y la grasa también nos proveen de energía y ayudan en otros aspectos importantísimos para nuestro organismo.
Los carbohidratos se clasifican en simples y complejos. A excepción de la miel, los carbohidratos encontrados en la naturaleza son complejos o la combinación de carbohidratos simples y complejos. Cuando ingerimos alimentos procesados, los carbohidratos complejos son comúnmente removidos. Una manzana contiene los dos tipos de carbohidratos, pero cuando es convertida en jugo su fibra es removida y el líquido sólo queda con carbohidratos simples. Los carbohidratos simples son rápidamente absorbidos por el sistema sanguíneo, lo que provoca una alta concentración de azúcar en la sangre. Mientras más azúcar hay en la sangre, en nuestro organismo, es más fácil que enfermemos de obesidad, de enfermedades cardiovasculares, diabetes, enfermedades degenerativas y de cáncer. El azúcar es uno de los "alimentos" del cáncer.
El azúcar posee una impresionante capacidad adictiva. La mayoría de las personas la ha experimentado. Estudios antropológicos han descubierto evidencias de que los pueblos tras padecer periodos de hambrunas, preferían alimentos "dulces". El azúcar actuaba como una droga, como un "premio" tras la miseria y el dolor padecidos... ¿No le suena parecido al "premio" que muchos les ofrecen a sus hijos dándoles de comer dulces, postres, tortas, queques, gelatinas, bebidas de fantasía, calugas, chocolates, galletas, etc., etc.?
La vida moderna y el mercado imprimieron a esa "tendencia" la posibilidad de la satisfacción inmediata, al alcance de la mano, a bajo precio y en cualquier lugar, llena de coloridos, formas y hermosas etiquetas... Una moneda o un par de ellas nos da la satisfacción al instante del azúcar, el veneno a nuestro alcance...
El azúcar ha sido añadida artificialmente a la mayor parte de los alimentos que hoy las personas consumen. Hay importantes estudios científicos que demuestran que el azúcar incrementa los opiáceos en el cerebro, provocando placer, como lo hace una droga como el opio, y sus derivados: la morfina, la heroína y la codeína. Pero la adicción que provoca el azúcar es aún más fuerte que la de éstas reconocidas drogas, más fuerte incluso que la de la cocaína. Y es que el incremento de opiáceos en nuestro organismo -tras consumir azúcar- es la causa principal de la fisiología que provoca nuestra adicción al azúcar. Las grandes corporaciones y transnacionales, preocupadas de ganar dinero y no de la salud de la población, saben perfectamente esto y ocupan el impacto de la publicidad, promoviendo el consumo de productos con altas concentraciones de azúcar, promoción que inician desde las edades más tempranas -ocupando todos los medios de comunicación-, definiendo hábitos en los niños y adolescentes que podrían durar toda la vida; es decir, creando la "dependencia del azúcar".
¿Por qué el azúcar es un veneno?
Podría ser catalogada como el peor veneno, y no sería una exageración. El azúcar aumenta la segregación de insulina, contribuyendo a que desarrollemos enfermedades como obesidad y diabetes. El azúcar de un refresco o una bebida, por ejemplo, llega al estómago y de ahí pasa a los intestinos, siendo absorbida inmediatamente por la sangre pues no es parte de ninguna fibra que inhiba o retarde el proceso de absorción. Si el azúcar pasara al sistema circulatorio, sin previo metabolismo, nos enfrentaríamos a un coma por hipoglucemia y moriríamos. El páncreas nos salva al segregar grandes cantidades de insulina para procesar el azúcar. Pero, ¿qué ocurre en una persona que ha padecido pancreatitis o que está a punto de padecerla? Cuando este acto se repite de manera constante -como ocurre con el tipo de dieta actual-, con frecuencia los niveles de insulina se elevan significativa y bruscamente, tendiendo a afectar nuestro organismo a largo plazo, desarrollando enfermedades crónicas del corazón, diabetes y cáncer, entre las más graves.
Además, el azúcar causa la pérdida de importantes minerales. Diversos estudios médicos y de nutrición han demostrado que el azúcar disminuye la presencia de minerales en el cuerpo, como el calcio, que es expulsado del organismo cuando ingerimos azúcar. En este caso, el organismo toma el calcio de los huesos, contribuyendo a ocasionar la enfermedad de la debilidad en los huesos, conocida comúnmente como osteoporosis. El delicado balance de minerales en el organismo es afectado por la ingesta de unas cuantas cucharadas de azúcar. Su consumo habitual puede provocar que el organismo pierda la habilidad de restaurar ese balance y se torne vulnerable a enfermedades que, de otra forma, nuestro cuerpo podría prevenir. El azúcar distorsiona las hormonas pues el sistema endocrino está compuesto por un gran número de glándulas interconectadas. Las hormonas sirven como mensajeras de las funciones corporales. Al ingerir azúcar algunas de las glándulas se fuerzan a trabajar de más para compensar los efectos del azúcar en el cuerpo. La glándula adrenal, ubicada en la parte superior de los riñones, se sobre estimula al consumir azúcar, y pierde su capacidad de regular el sodio y el potasio, la presión sanguínea, el metabolismo de la glucosa, la adrenalina y la secreción de esteroides sexuales. Otros estudios médicos señalan que el azúcar puede propiciar algunas alergias a los alimentos. Los alimentos requieren ser descompuestos por las enzimas para ser asimilados por nuestras células. Las enzimas trabajan precisamente de manera óptima cuando nuestro cuerpo tiene un balance apropiado de minerales. El azúcar, al disminuir las reservas de minerales puede debilitar el sistema de enzimas con lo que algunas partículas de alimentos podrían entrar a la corriente sanguínea. Al ocurrir esto el sistema inmunológico puede confundir dichas partículas con "invasores", provocando que el organismo lance un ataque de defensa cada vez que se consume ese alimento. Esa es una de las causas de las alergias. Muchas alergias y erupciones en la piel podrían mejorar si la gente dejara de consumir azúcar refinada -el azúcar blanca-, y sólo la obtuviera naturalmente de frutas y semillas.
Hoy se sabe que el azúcar paraliza el sistema inmunológico. Los fagocitos -un tipo de glóbulos blancos- atacan a las bacterias y virus, como parte integral del sistema inmunológico, previniendo y controlando infecciones. El número de organismos digeridos por los fagocitos disminuye dramáticamente durante más de seis horas después de ingerir azúcar. Además, el consumo de azúcar ocasiona enfermedades crónicas: altas concentraciones de azúcar en el sistema circulatorio causan daños permanentes a las estructuras moleculares de las proteínas. Una vez dañadas, las proteínas pueden provocar enfermedades crónicas degenerativas. El azúcar incrementa el riesgo de desarrollar cáncer; la epidemia de nuestro tiempo, una de las principales causas de muerte en el mundo. Especialistas han señalado que el azúcar puede inducir el cáncer. Las células segregan productos de desecho llamados radicales libres. Las enzimas neutralizan los efectos negativos de los radicales libres. Pero las enzimas necesitan un balance adecuado de minerales para ser efectivas. Cuando el azúcar reduce los minerales del cuerpo, las enzimas no son tan efectivas y se incrementa la presencia de radicales libres que pueden causar una reducción en la disponibilidad de oxígeno lo que lleva a mutaciones celulares cancerígenas.
Las grandes corporaciones y transnacionales han desarrollado "sustitutos del azúcar" que endulzan "con o sin calorías", dice la publicidad. Pero todos estos productos son promovidos por las mismas industrias procesadoras de alimentos. No son una solución al azúcar. El Acesulfame potásico, el Alitame, el Aspartamo, la Sal de aspartame-acesulfame, el Ciclamato, el Dulcin, el Glucin, la Neohesperidina dihidrocalcone, el Neotame, el P-4000, la Sacarina, la Sucralosa, el Isomalt siguen promoviendo y manteniendo la adicción al gusto por alimentos y bebidas "dulces". Hoy se sabe, además, que representan más riesgos para la salud. Médicos y nutricionistas señalan que podrían ser incluso aún más peligrosos que el azúcar.
Arnaldo Pérez Guerra
Alainet
(*) Fuentes:
- In Defense of Food, de Michael Pollan (The Penguin Press, 2008).
- Sweet Deception, de los doctores Joseph Marcola y Kendra Degen Pearsall (Nelson Books, 2006).
Marti,,holaaa,, buenos dias,,,gracias por el mensaje tannnn importante,, hay veces se nos va de la mano,, asi ya mas concientes evitar un poco el azucar,, yo que soy un poco adicta a este dulce mal,,, gracias amiga mia por estar ,,que tengas linnndo dia hasta siempre,,,Celi.
Todo alimento procesado nos trae problemas de salud. Yo vivía enferma, sin fuerzas, cambie de forma radical mi dieta, y cambio mi salud. No como nada enlatado, nada frito, nada que contenga colorantes, o conservantes. En vez de azucar uso miel para endulzar.
Al ingerir mucha fruta, verdura y semillas me volvieron las fuerzas, no me resfrío jamás, y estoy mas delgada, ando corriendo. A mi me educaron con otro tipo de alimentos, y me costo mucho cambiar, tuve mucho apoyo de mi actual marido que es alemán, y al dia de hoy se me hace mas facil cocinar. Ahora no cambiaría por nada mi actual forma de comer.
otra cosa es que no podía dormir, y ahora duermo 7 horas de un tiron, y me levanto como nuevecita.
Si Damara es peor el "remedio" que la enfermedad, pero el azúcar es terrible, de a poko como todo lo demás la voy dejando, me cuesta mas la sal.
Todo me costo mucho, porque como dice Nati uno se acostumbra desde que nacio. Pero de a poko se logra.
Nati, a mi me encantaría lo de las semillas ... pero tiene unos precios prohibitivos, es lo que mas me gusta comer, como la miel tb. pero el dinero no alcanza.
Miel con avellanas o nueces o almendras mmmm que exquisito!!!
En casa hace rato que no comemos carne de ningún tipo. Pero aún nos falta, frito algo siempre se come, y las harinas ... es difícil guaaaaa!!!!
Una cosa es cierta, para quien puede, comer sano es una solución a la salud
Pos ya pude comparar un tarro chicoel domingo en la feria mi marido compra uno de a kilo, igual dura un suspiropero casi no consumo azucar, no paso de 3 cucharaditas chiquitas para tomarme mi cafecito nocturno, la miel con el café aún no me sabe bien.
A diferencia del azúcar blanco, aporta importantes sustancias esenciales para el organismo; es rico en sacarosa natural, por lo que resulta de fácil absorción y digestión.
El azúcar integral es extraído del jugo de la caña de azúcar. Este líquido se cocina en bateas métalicas hasta obtener su total cristalización.
Gracias a que no pasa por el proceso de refinamiento, el azúcar integral conserva toda la riqueza de los sales minerales (calcio, magnesio, potasio, sodio, etcétera), fibras y vitaminas asociadas en forma natural a la sacarosa en la caña de azúcar.
En cambio, el azúcar refinado está desprovisto de todas estas sustancias y es sacarosa pura. De ahí que se lo llama “ladrón de calcio”, dado que al ingresar al cuerpo se trata de unir con los minerales que le faltan, especialmente calcio, formando un compuesto denominado sucrato de calcio: éste no puede ser aprovechado por el cuerpo y es eliminado (vía riñones o intestino). Resultado: el organismo pierde una proporción de calcio, lo cual puede incidir en la aparición de caries, raquitismo, osteoporosis…
POR QUE SI…
El azúcar integral o rubia nos provee de las siguientes sustancias esenciales:
√ Fibras alimentarias: hacen que la absorción de los azúcares sea más lenta. En consecuencia, estas sustancias contribuyen a que la asimilación de los alimentos sea más equilibrada y que pueda reservarse por más tiempo energía natural en el cuerpo.
√ Calcio y fósforo: estos minerales favorecen la coagulación de la sangre, y son esenciales para la formación y mantenimiento de las piezas dentales y òseas, etcétera.
√ Hierro: vital para prevenir episodios de anemia.
√ Potasio: colabora en el proceso metabólico.
√ Vitaminas del grupo B: si bien el azúcar integral no sobresale por su aporte en estas sustancias, cabe aclarar la labor que desempeñan las mismas en el organismo: intervienen en el buen funcionamiento del sistema nervioso y normalizan el metabolismo.
COMPOSICION BASICA
Cada cien gramos de azúcar integral de caña se encuentra…
Hidratos de carbono…………..96,4 gramos
Calcio…………………………85 miligramos
Grasas…………………………0 gramo
Hierro………………………….3,4 miligramos
Potasio…………………………344 miligramos
Agua……………………………2,1 gramos
Fósforo…………………………19 miligramos
Colesterol………………………0 miligramo
Vitamina B1……………………0,010 miligramo
Vitamina B2……………………0,031 miligramo
Vitamina B3……………………0,180 miligramo
Calorías…………………………374
POR QUE NO…
Elegir azúcar blanco o refinado no resulta una buena opción, a continuación por las siguientes razones:
1) En principio, vale aclarar que se trata de un producto desprovisto de todos los nutrientes que contenía en su origen, por causa de los procesos de refinamiento; siendo entonces un alimento totalmente desvitalizado, que sólo ofrece calorías vacías.
2) Debido a que el azúcar refinado (blanco) es un tipo de hidrato de carbono simple (monosacáridos y disacáridos) que aumenta la respuesta insulínica (produciendo un descenso de azúcar en la sangre), es posible que traiga aparejado importantes desequilibrios nerviosos como, por ejemplo, estrés y otras patologías emocionales, que pueden derivar en trastornos mentales graves, por déficit en el metabilismo energético cerebral.
3) No sólo por su aporte calórico, sino también por su carencia nutricional, el consumo de azúcar refinado en altas proporciones puede influir en el desarrollodo de la obesidad y otros males: dolor de cabeza, palpitaciones, gastritis, insomnio, alergias, etcétera.
4) Durante el proceso de refinamiento, se pierde un componente vital de la caña de azúcar: la melaza, que concentra gran parte de los elementos más nutritivos. Por ejemplo, en su haber se encuentran la mitad de los aminoácidos esenciales que el cuerpo precisa para mantener tejidos y células en buen estado.
* SACAROSA NATURAL
La sacarosa presente en el azúcar integral es de tipo simple (disacárido), por lo que resulta mucho más digestible y de lenta disolución, a diferencia de otro tipo de carbohidratos complejos (polisacáridos) como, por ejemplo, las dextrinas o el almidón.
* CALORIAS, ¿MAS O MENOS?
En relación al azúcar blanco (refinado), el integral aporta menos calorías, pero en poca variación. La diferencia sustancial entre ambos productos, es que el no refinado es sacarosa natural (disacárido formado por glucosa y fructosa).
* UN GRAMO DE AZUCAR
Por cada litro de sangre en el cuerpo, es necesario incorporar un gramo de azúcar, ya que si el organismo no lo recibe es posible que se produzca un desórden en el nivel de glucosa; es decir, que bajen los valores óptimos generando un cuadro de hipoglucemia. Por el contrario, el consumo excesivo de azúcar (en especial blanco) puede ocasionar obseidad e, incluso inducir la diabetes.
* MAS VITAMINA B1
Siempre que se consuman azúcares, es necesario no olvidarse de ingerir alimentos ricos en vitamina B1 (cereales, legumbres, leche y huevo) dado que la misma interviene en el proceso de asimilación del azúcar.
* A LA HORA DE ELEGIR…
A fin de poder diferenciar el azúcar blanco del integral, es bueno estar atento a los siguientes consejos:
- El azúcar integral tiene un color café muy particular, por su contenido en fibras solubles de fácil absorción y digestión.
- Al tocarlo, se adhiere a los dedos, se pegotea. Esto indica presencia de melaza.
UN “PELIGRO” EN LA COCINA
Según especialistas, el azúcar blanco desencadena la producción de endorfinas (opiodes naturales) segregada por la glándula hipófisis, siendo fundamental en el proceso de adicción. Es por esto, que – por su consumo masivo – al azúcar se lo considera como una droga peligrosa, ya que se lo utiliza en todos los hogares y se lo encuentra en casi todos los alimentos industrializados.
Al ser éste una sustancia carente de todo tipo de nutrientes, los especialistas en Nutrición aconsejan eliminarlo de la dieta y reemplazarlo por otros productos (miel, melaza, azúcar integral) mucho más saludables.
- 5 y 1/2 tazas de miga de pan integral de avena o gluten.
- 2 y 1/2 tazas de leche de soja o descremada de vaca.
- 1 taza de azúcar integral.
- 3 huevos y 2 yemas, preferentemente orgánicos.
- 1 cucharada de esencia natural de vainilla.
- 100 gramos de nueces picadas.
- Queso untable semidescremado para decorar, cantidad a gusto.
Pasos a seguir
1- En un bol colocar la miga de pan bien desmenuzada. Incorporar la leche y dejar unos minutos a fin de que se impregne bien.
2- Agregar el azúcar, los huevos y las yemas, ligeramente batidos y la esencia de vainilla. Mezclar bien. Por último, incorporar las nueces.
3- Colocar la preparación en un molde Savarín de 24 centímetros de diámetro (en lo posible), previamente acaramelado, y llevar a cocinar a horno a temperatura media, durante 50 y 60 minutos.
4- Retirar y dejar entibiar. Aún tibio desmoldar y luego llevar a enfriar a la heladera. Decorar a gusto con el queso.
Asesoramiento Noemí García Ecónoma y Docente Naturista
Azúcar integral: a partir de la melaza o miel de caña y tras un proceso natural se convierte en azúcar de caña. Según la variedad de la caña obtendremos otra variedad de azúcar integral denominado Panela, Mascobado o Rapadura.
Concentrado o sirope de manzana: en los países más nórdicos es muy utilizado este edulcorante o endulzante natural que se obtiene cocinando a fuego lento el zumo de manzana. Añade un sabor suave y muchos de los nutrientes de la manzana.
Fructosa: se utiliza principalmente en alimentos “tolerados” para diabéticos. Se obtiene de las frutas y en pequeñas cantidades pueden tomarla los diabéticos. Su sabor, color y textura es muy similar al azúcar blanco o refinado.
La Melaza o miel de caña: se obtiene al machacar la caña de azúcar y luego cocinar ese jugo hasta que se evapore el agua. Tiene un agradable sabor que recuerda al regaliz y contiene más nutrientes que el azúcar refinado.
Las Melazas: son endulzantes o edulcorantes naturales obtenidos a partir de cereales como el arroz, maíz, cebada, etc. Tienen un sabor muy suave y son muy apreciadas por las personas que prefieren sustancias que no endulcen demasiado.
La miel: es uno de los edulcorantes o endulzantes naturales más antiguo ya que no necesita ninguna elaboración. Además de su sabor se utiliza por sus propiedades medicinales (cicatrizante, expectorante, etc.). Muy apreciada para endulzar las infusiones de plantas medicinales.
Sirope de agave: es uno de los endulzantes o edulcorantes naturales que se obtiene de un cactus y que ya utilizaban incas y aztecas. Ayuda a regular los niveles de glucosa.
Sirope de arce: es una especie de jarabe o sirope que se obtiene del jugo del arce que es un árbol típico de Canadá y países nórdicos. Es rico en nutrientes y muy famoso por ser el ingrediente principal de la dieta del Sirope de Savia.
Stevia o Estevia: es una planta original del Amazonas. La ventaja de estos endulzantes o edulcorantes naturales que no tienen calorías y que su dulzor es 20 ó 30 veces superior al azúcar. También son valoradas sus propiedades reguladoras de la glucosa (diabetes e hipoglucemia).
Cada endulzantes o edulcorantes naturales tiene su sabor peculiar y sus ventajas e inconvenientes. Lo ideal es pedir consejo en nuestro herbolario o a nuestro médico o especialista. Los diabéticos o personas interesadas en controlar las calorías es necesario pedir consejo sobre que endulzantes o edulcorantes naturales les conviene más. En general tenemos que valorar que aunque la mayoría de endulzantes o edulcorantes naturales contienen más calorías que los endulzantes o edulcorantes artificiales también es verdad que tienen beneficios nutricionales o propiedades medicinales interesantes.