Leonard George Horowitz, también conocido como Len Horowitz o Lenny Horowitz, nació en 1962. Es doctor en Odontología, y posee postgraduados en su especialidad y en Salud Pública. Dejó su consulta de dentista para introducirse en la industria de la salud y publicar varios libros, folletos (ambos publicados por su propia editorial, Tetrahedron), DVDs, CDs y artículos en revistas de salud pública.
Entre los conocidos títulos del doctor Horowitz está Deadly Innocence: Solving the Greatest Murder Mystery in the History of American Medicine (1994) (Inocencia mortal: Resolviendo el mayor misterio del crimen en la historia de la medicina americana, sin edición en castellano) donde afirma que el dentista David J. Acer es un pedófilo y asesino en serie que utilizaba el VIH (HIV, virus de inmunodeficiencia humana) como arma; y Emerging Viruses: Aids & Ebola - Nature, Accident or Intentional? (1996) (Virus emergentes: sida y Ébola- ¿Naturaleza, accidente o intención?, sin edición en castellano) en el que presenta la teoría de que tanto el sida como el Ébola fueron creados por el gobierno de los Estados Unidos como armas biológicas para su uso en un plan genocida. Como autor, sus temas han derivado de la salud pública dental a las teorías conspirativas relacionadas con la salud, la oposición a la vacunación y las terapias de la Nueva Era, con elementos de la Numerología y de las profecías apocalípticas cristianas.
El doctor Horowitz colabora con varias empresas de venta online de remedios para la salud procedentes de la Medicina Holística. En el brote del Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS, Severe Acute Respiratory Syndrome) de 2003, él y varios socios anunciaron un "efectivo tratamiento" para la enfermedad, una gama de productos naturales conocida como "Urbani". El doctor Urbani, posteriormente fallecido a causa del SARS, fue el primero que informó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre este síndrome. La FDA (Food and Drug Administration), organismo controlador de los alimentos y los medicamentos en Estados Unidos, y la FTC (Fair Trade Commission), entidad reguladora del comercio, advirtieron de claras infracciones relacionadas con el producto, pero parece que nunca dejó de fabricarse. El doctor Horowitz también abrió un spa en Hawaii, llamado Steam Vent Inn, que fue clausurado por la administración en 2006.
Las teorías de Horowitz sobre los virus y los peligros de la vacunación han sido bien recibidas en algunos sectores. En algunas páginas web amigas, Bo Gritz es citado sugiriendo que es merecedor del Premio Nobel. Nation of Islam (Nación del Islam, organización afroamericana) advierte a los padres afroamericanos de los peligros que tiene la vacunación para sus hijos, aparentemente por inducción de Horowitz. El 28 de mayo de 2008, el reverendo Jeremiah Wright, antiguo pastor del senador Barack Obama en la Iglesia Unitaria de la Trinidad de Cristo (Trinity United Church of Christ), mencionó el libro de Horowitz Emerging Viruses: AIDS and Ebola como apoyo para su sermón, en el que hablaba de como el gobierno de los Estados Unidos "mintió sobre la creación del virus del sida como medio genocida de la población negra". Muchos califican las conclusiones de Horowitz como teorías conspirativas, y él mismo parece identificarse con éstas, al haber participado en el Conspiracy Con (Congreso de la Conspiración) en 2001, 2004 y 2007.
El doctor Horowitz ha publicado unos veinte artículos en revistas científicas, entre ellas el Journal of the American Dental Association (Diario de la Asociación Dental Americana), General Dentistry (Odontología General), y el Journal of School Health (Diario de Salud Escolar).
A principio de los noventa, el control del sida en odontología y el miedo que abordaba a los pacientes sobre los riesgos de contraerlo en la consulta del dentista, se convirtieron en los temas principales de sus publicaciones y artículos. En aquellos tiempos estos temas fueron muy tratados gracias al caso de Kimberly Bergalis, ella y otros cinco pacientes afirmaban haber contraido el sida en la consulta de su dentista David J. Acer, a su vez enfermo de sida. Las investigaciones iniciales concluyeron que todos portaban la misma cepa del virus y que la fuente más probable de contagio era el doctor Acer.
Entrada la década de los noventa, el pensamiento y las opiniones del doctor Horowitz se situaron al margen del consenso médico, siguiendo la tendencia marcada por una publicación suya diez años anterior, In Defense of Holistic Health (En defensa de la medicina holística). Su investigación personal sobre el doctor Acer parece ser el punto de partida de su carrera como autor de libros y otros soportes defendiendo la teoría de la conspiración médica, ya que no sólo concluyó que Acer tuvo intención criminal, sino que el gobierno de los Estados Unidos había ocultado evidencias de que el sida había sido creado artificialmente.
En la Conferencia Internacional sobre sida de Vancouver (1996) la sinopsis de una presentación en la que Horowitz figura como investigador principal reza: "la teoría genocida del sida no se puede descartar". En 1999, Da Vid, colaborador de Horowitz en la presentación antes citada de la conferencia de Vancouver, declaró acerca de sus teorías conspirativas que él (Horowitz) le estaba "dando demasiado crédito a aquellas personas tan bien organizadas...., le dije directamente que creía que debía haberse enfurecido".
En 1994, Horowitz publicó algunos artículos sobre el caso de David J. Acer, un dentista de Florida que, de acuerdo con las administraciones de salud federales y del estado de Florida, había infectado a seis de sus pacientes con el virus del sida. En su libro Deadly Innocence: Solving the Greatest Murder Mystery in the History of American Medicine publicó su teoría sobre la intencionalidad de Acer en el contagio y con esto llamó la atención de la prensa. El doctor Horowitz no fue el único en concluir que el contagio había sido deliberado, los periodistas citaban fuentes reputadas diciendo que "fue un crimen....simplemente porque hemos eliminado cualquier otra posibilidad" y "sea o no científicamente válido, es definitivo que esta es la teoría más frecuente al menos dentro de la comunidad odontológica". El caso despertó una gran preocupación pública y profesional ya que parecía ser la primera vez que se daba un contagio, no sólo de transmisión del sida de dentista a paciente sino desde cualquier profesional del ámbito médico, y por el número de contagiados por un solo profesional.
En las investigaciones previas se concluyó que el contagio se había dado por errores de procedimento de Acer. Sin embargo, la ruta de transmisión no fue nunca identificada, y se descubrieron errores en los análisis del CDC (Centers for Disease Control, Centros para el Control de las Enfermedades) y discrepancias en los informes de algunos pacientes infectados. El interés público fue máximo en junio de 1994, cuando el programa 60 minutes (60 minutos) dedicó su espacio al caso. Dejó de considerarse irrazonable sugerir que los pacientes infectados del doctor Acer simplemente habían mentido sobre su actividad sexual o uso de drogas inyectadas, o que la similitud encontrada entre las cepas del virus por los análisis del CDC podría ser errónea. Sin embargo, meses antes de la emisión de este programa, el 2 de abril de 1994, Horowitz aportaba otra teoría: dado lo improbable de la aparente transmisión "accidental" de dentista a paciente, sólo la "intencionalidad" del profesional podía explicar el grupo de contagios. En pocas palabras, la posición de Horowitz era que Acer había matado a Bergalis y sus otros pacientes infectándoles intencionadamente con el virus del sida motivado por un plan político.
Lo que distinguía las alegaciones de Horowitz de otras de la época era que no estaban limitadas a la intencionalidad de Acer, sino que también implicaban a las agencias del gobierno americano, federales como estatales, en su encubrimiento. Lo que escribió en Deadly Innocence prefiguró sus posteriores escritos a favor de las teorías de conspiración sobre el sida. Según Horowitz, "el CDC y los responsables de salud de Florida han encubierto todas las pruebas que incriminaban a Acer en 36 asesinatos en serie investigados por el FBI (Federal Bureau of Investigation, Despacho Federal de Investigación) ... me vi forzado a concluir que las autoridades habían ocultado las pruebas para impedir que la prensa, y posteriormente el público, investigasen sus antecedentes". El testimonio de Acer en el proceso legal decía que él creía que se estaba muriendo por un virus creado por el gobierno. Según el testimonio del mejor amigo de Acer, este creía que el objetivo de liberar el virus era provocar el genocidio de la comunidad gay americana y la comunidad negra del tercer mundo.
Sin embargo, Edward Parsons, el "mejor amigo" de Acer citado antes, en su testimonio real bajo juramento habría dicho sólo que "Acer estaba enfadado por su infección de sida", y especificó que "Acer no le dijo que fuera a infectar a sus pacientes de manera intencionada". En otros lugares Parsons es citado diciendo que Acer había mencionado a los hemofílicos, drogadictos y homosexuales entre las categorías que le parecían demasiado marginales como para que el gobierno americano actuara en su contra con el sida. No obstante, Parsons no menciona ninguna categoría racial, étnica o nacional, y en ningún sitio es citado diciendo que Acer haya mencionado que el virus del sida fuera creado por el gobierno americano, de forma accidental o intencional, o que hubiera sido liberado por algún propósito de algún gobierno.