Odio la palabra fracasado o fracaso, odio la palabra culpabilidad ... y tantas otras que nos han metido a prepo en nuestros kokitos, y nos han hecho creer lo que no existe.
Claro que no existe el fracaso, que invento portentoso (dicho con ironia claro!!)
Gracias Lali por traer un texto en contra del fracaso, mala influencia humana.