Es difícil creer que la vida es toda para nada. ¿No podemos aceptar la felicidad cuando llega? Hay que reconocer que hay una gran cantidad de sufrimiento y horror en este mundo. Pero si hemos de aceptar las partes tristes de la vida, también debemos abrazar sus partes buenas. Mientras estemos en este mundo, debemos aceptarlo todo. Si lo que viene a nuestro encuentro es ocasionalmente maravilloso, nadie debería negarnos nuestro disfrute. Todos sabemos que cada subida es seguida por una caída. ¿Por qué sólo mortificarse con terror al futuro? Mientras nos hayamos comportado responsablemente, no hay nada de malo en disfrutar lo mejor que la vida tiene para ofrecer.
Mira a una gata mientras se estira satisfecha al sol. No hay pensamiento sobre el próximo momento, sólo el puro placer del presente. Puedes estar seguro que ella seguirá siendo capaz de limpiarse, sigue siendo capaz de atrapar ratones, y sigue siendo capaz de hacer todas las cosas que un gato debe hacer. Pero ella es sin ansiedad, y así es pura y totalmente quien debería ser. Actúa como si ella fuera la favorita de la naturaleza. ¿Y quien ha de decir lo contrario?
D/A
Lalita