Entrevista al fundador de Actuable, el joven catalán de 30 años Francisco Polo. Su plataforma de activismo online cuenta con casi un millón de usuarios |
Este barcelonés de 30 años creó en septiembre de 2009 la plataforma Actuable, con más de 900.000 usuarios, que facilita el activismo online de la ciudadanía mediante peticiones en la red para promover cambios, como retirar la publicidad de «La Noria».
¿Qué es Actuable?
Es una plataforma que permite a personas y organizaciones sumar fuerzas ante injusticias y se hace a través de peticiones concretas para provocar cambios concretos –mediante la recogida de firmas o el envío de correos electrónicos– que generalmente giran en torno a temas de derechos civiles, medio ambiente o transparencia política.
Usted es licenciado en derecho, ¿cómo se le ocurrió crear esta plataforma, estaba en paro?
No (ríe), todo empezó en 2007, cuando estaba opositando para la carrera diplomática y vi que en España se fabricaban bombas de racimo. Hice una campaña en mi blog para intentar acabar con esto y al día siguiente decenas de blogueros se sumaron y, unos días después, el Gobierno se comprometió a prohibir su fabricación. Fue un bombazo en Internet, aún no estaban implantadas las redes sociales, pero tuvo éxito. A partir de ahí pensé en cómo hacer que una persona sin conocimientos tecnológicos pudiera lograr algo así. Cualquiera puede crear una petición registrándose y siguiendo unos pasos sencillos.
¿Cuántos usuarios tienen registrados?
Desde que lanzamos la plataforma, en septiembre de 2010, hemos superado ya a los 900.000 usuarios registrados, que es lo que hizo Tuenti en dos años. Hemos crecido un 1.000 por cien en lo que llevamos de año y el éxito no es nuestro, sino de la gente. Es una plataforma online de referencia en el campo social.
¿Cuánta gente crea peticiones y cuánta las suscribe?
No lo sé, la cifra de gente que crea peticiones es minúscula pero supongo que se corresponderá con la idea de que, en general, un 2% de la gente es la que provoca cambios en el 98% restante.
¿Tienen entre su audiencia a muchos indignados?
Imagino que sí, yo el primero, pero no solo. Este portal viene de mucho antes del 15-M y tiene su origen en el consumismo en el que vivimos de hace décadas, hay gente que se cree ese discurso de que somos meros consumidores y otros que creen que se puede empoderar a la gente y que se dé cuenta de que cuando se unen muchas personas en una causa los cambios son imparables.
¿Cuánto hay de éxito y de utopía en este proyecto?
Un poco de utopía y mucho de éxito. El debate sobre la eficacia del activismo online está ya superado porque no paramos de tener una victoria tras otra.
Fueron de los primeros en pedir que se retirara la publicidad de La Noria y lo han logrado.
Sí, fue el bloguero Pablo Herrero el que lo pidió y esa ha sido una victoria aplastante, todas las marcas han retirado su publicidad. Hemos tenido más triunfos, como una petición para que se desratizara una zona de Madrid, el Gallinero, con ratas enormes que mordían a los niños, que después de seis semanas y 6.000 firmas se consiguió que el Ayuntamiento de Madrid limpiara la zona; o conseguir la nacionalidad española de la hija de unos padres gays a la que se discriminaba por ello. No se puede hablar de utopía con esta realidad.
¿Con qué petición han tenido el mayor número de firmas?
Con la que se hizo a la Junta Electoral Central para que se permitiera a los manifestantes de Sol seguir manifestándose en la jornada de reflexión de las anteriores elecciones. Se lograron más de 200.000 firmas.
Les toman en serio. ¿Ayudan a su labor las redes sociales?
Habrá quien lo tome en serio y quien no, pero nadie puede ignorar a la gente cuando se manifiesta masivamente. Y las redes sociales son fundamentales, nos apoyamos mucho en Facebook y Twitter.
La red es un instrumento poderoso, ¿puede ser también un arma de doble filo?
Internet no tiene poder, el poder es de la gente en Internet. Nosotros proponemos usar bien esta herramienta para lograr cambios en la sociedad.
La Opinión de Málaga