Cien mil personas mueren de hambre o por sus secuelas inmediatas todos los días a pesar de que la Organización de las Naciones Unidas para la agricultura y la alimentación señala que la agricultura mundial, con la capacidad actual de producción, podría alimentar sin problema a 12.000 millones de seres humanos, es decir, el doble de la población actual. El relator de la ONU sobre el derecho a la alimentación, Jean Ziegler, es concluyente: "La muerte por hambre de cualquier niño no es una fatalidad, es un asesinato. Y el futuro es siniestro".
Jean Ziegler