¿Cuál es tu ideal?
El ideal es el verdadero motor de tu vida,
es el que te potenciará en cada momento
y en cada acontecimiento que te toque vivir.
Es el que da verdadero sentido a tu existencia,
es el que te irá marcando, indudablemente,
el rumbo, es la brújula que te permitirá navegar
por aguas tranquilas y por aguas borrascosas.
Pero es importante que conozcas con exactitud
cuál es el que has elegido como norte de tu vida,
ya que de él depende tu meta y el poder arribar
a ella con seguridad y felicidad.
Si no tienes ningún ideal en tu vida, ciertamente
que ella transcurrirá en la monotonía y la mediocridad.
Un pensamiento que leí de joven me llegó de manera
muy profunda: "Cuando pones la proa visionaria
hacia una estrella, y tiendes el ala hacia tal excelsitud
inasible, deseoso de perfección y rebelde
a la mediocridad, llevas en ti el resorte misterioso
de un ideal".
Tu ideal puede revestir muchos ropajes:
un buen trabajo, una linda casa,
un auto moderno, una hermosa familia, etc.
Pero debes tener presente que si tu ideal
está sólo en lo material, en las cosas,
finalmente llegarás a tu meta verdaderamente
cosificado, serás una cosa más, que hoy
se utiliza y tarde o temprano, se tira,
se deja en un rincón, en desuso.
Si tu ideal está en el dinero, en el sexo
o en el poder, caerás en una alienación
que convertirá tu vida en un verdadero infierno;
en una carrera en la que ya no podrás conducir
tú el volante y terminarás, seguramente,
en el fondo de un abismo.
Tu ideal no puede estar al mismo tiempo
en lo material y en lo espiritual, recuerda
lo que el Señor ya nos ha dicho:
"Nadie puede servir a dos señores, porque
aborrecerá a uno y amará al otro, o bien,
se interesará por el primero y menospreciará
al segundo. No se puede servir a Dios
y al dinero".
Pero si tu ideal, trascendiendo todo lo terreno
y material, está firmemente puesto en Dios,
ten por seguro que tu brújula marca correctamente
el verdadero norte de tu vida y es Él quien está
como timonel de tu nave, por lo que, a pesar
de las tormentas, que seguramente deberás sortear,
te conducirá seguro a un final de alegría y felicidad.
Pon tu ideal en el Reino de Dios y confía plenamente
en que nada te faltará: "Busquen primero
el Reino de Dios y su justicia, y todo lo demás
se les dará por añadidura".