La era que nos ha tocado vivir es sumamente apasionante, desde hace algunas
decadas estamos en cambios generacionales muy grandes, que están cambiando
completamente el mundo en el que vivimos. La comunicación hoy en día es
sumamente sencilla si contamos con una conexión a Internet, tenemos muchas
formas de comunicarnos. La web ha adquirido una importancia mayúscula. Si
ya era importante, ahora lo es mucho más, y todo hace indicar que cada vez
seguirá siendo más importante. Gran culpa de esto es la evolución que está
habiendo y el uso masivo que le damos los usuarios, visitando montones de sitios
web y usando muchas redes
sociales.
Debido a esto muchas han sido las empresas que se han dado cuenta que la
información de los usuarios, aunque sea anónima, puede resultar muy valiosa.
Obviamente espiar las comunicaciones de los usuarios no es legal, sin embargo
diversas empresas han encontrado formas de sacar un rendimiento a la información
de los usuarios, lo cual ha levantado muchas quejas en diversos sectores, tanto
entre los usuarios como en órganos gubernamentales. Empresas de Internet pueden
aprovechar nuestra información gracias a las cookies, mediante las cuales
podemos ser rastreados. Esto también se conoce como tracking y es
algo que está en boca de muchos durante las última semanas. Por ello en nuestra
guía semanal hemos decidido daros una serie de consejos sobre cómo evitar que
podamos ser rastreados en nuestro día a día dentro de la red de redes.
Lo que
dicen los gobiernos
Antes de entrar en una explicación más extensa sobre como combatir el rastreo
hay que poner algo de contexto sobre cómo se hace este, no me extenderé mucho en
ello ya que en este
artículo escrito por mi compañero Juan J. Velasco tenéis información muy
detallada. Se puede decir que las cookies son pequeños pedazos de
información que diferentes páginas web y servicios hacen que ser guarden en
nuestro equipo. Aunque estos datos sean guardados en nuestro equipo, pueden
ser usados para crear un perfil nuestro, sobre nuestros gustos, gracias a los
sitios web que visitamos, las búsquedas que realizamos. Y en base a toda esta
información, mostrarnos publicidad personalizada, que es la práctica más
común.
En Europa la Comisión Europea es una de las que más presión ha estado
haciendo para intentar asegurar al máximo la privacidad de los usuarios dentro
de su territorio. Si bien se permite el uso de cookies no se permite que
lo hagan de forma invisible para el usuario, los sitios web tienen que informar
de forma clara que el sitio está guardando estos datos en su equipo, con que
objetivo lo hace, y por cuanto tiempo serán guardados. El usuario será el que
tiene que decidir si permite guardar que se guarde la cookie o no. Aunque hay
pequeñas excepciones: se salvan las cookies más importantes, que sean
imprescindibles para el correcto funcionamiento del sitio web.
Estas son las intenciones que tienen en la Comisión Europea, pero todo esto
es algo que todavía no está resuelto, ya que hasta este momento no se está
aplicando la norma.
Llegados a este punto, si tienes claro que no quieres que bajo ningún
concepto nadie te pueda rastrear con el motivo que sea, puedes pensar que puede
ser una buena idea impedir el almacenamiento de las cookies. Pero nada
más lejos de la realidad. No es una buena idea, principalmente por que esos
pedazos de información que son las cookies son parte esencial de la web que
conocemos actualmente. Si impedimos de forma sistemática que se bloqueen
lograremos que muchos sitios web no funcionen de la forma adecuada, y la
navegación sea mucho más molesta para nosotros, por ejemplo, por el simple
motivo de tener que ingresar el usuario y contraseña cada poco tiempo. Las
cookies son usadas por muchos sitios para recordar nuestros datos cuando nos
logueamos en un sitio.
Las herramientas de defensa de los navegadores
Los navegadores web forman parte importante de todo este entramado, son las
aplicaciones que usamos para navegar y son los primeros que tienen que dar
facilidades al usuario para permitir o denegar el almacenamiento de cookies.
Afortunadamente algunos de ellos han hecho modificaciones en sus últimas
versiones y han implementado características para impedir que podamos ser
rastreados si queremos. A continuación hacemos un repaso de cada uno de
ellos.
Mozilla Firefox
El navegador de Mozilla fue uno de los primeros en implementar la
característica Do not Track, una opción con la que le decimos a los
sitios web que no aceptamos determinadas cookies que son usadas para obtener
información de nuestra navegación.
Para poner en funcionamiento esta opción tenemos que seguir unos pasos muy
simples. Tan sólo tenemos que acceder a las preferencias de Firefox e ir a la pestaña Privacidad,
allí encontraremos una opción que nos dice “Decir a los sitios web que no quiero
ser rastreado”. Sólo tenemos que activar la opción y aceptar los
cambios.
Internet Explorer
Las cosas no son tan sencillas en el caso del navegador de Microsoft, que no
tiene una opción como la de Firefox. Podemos hacer uso de herramientas de
terceros, como la extensión AdBlock que bloqueará algunos anuncios y con ellos
sus cookies.
También podremos hacer uso del modo de navegación InPrivate que nos
convierte en invisibles, para nuestro equipo y para el resto. Sin embargo
esto no resulta muy practico ya que no podemos navegar con normalidad, ya que
además de bloquear las cookies tampoco se guardarán los sitios que visitamos en
nuestro historial, tenemos que identificarnos en todas las páginas cada vez que
iniciemos en modo InPrivate… en definitiva, nada practico.
Google Chrome
Las cosas no mejoran en este aspecto en el navegador de Google que como en el caso de Internet
Explorer también tenemos que hacer uso de herramienta de terceros para poder
bloquear las cookies. AdBlock sigue siendo una buena solución, además de la
extensión Disconnect,
la cual funciona muy bien.
Safari
El navegador de Apple si ofrece buenas soluciones, como Firefox. Safari bloquea por defecto el
almacenamiento de cookies de terceros, lo cual es realmente bueno. Logicamente
tenemos la posibilidad de habilitarlo si así lo queremos, tan sólo tenemos que
acceder a las preferencias de seguridad y marcar Aceptar cookies.
Opera
El veterano navegador Opera todavía no tiene implementada de forma nativa una
solución como Firefox o Safari, sin embargo lo tiene en su calendario y pronto
estará disponible. La solución elegida por los chicos de Opera es la misma que han elegido en
Mozilla y estará disponible en la siguiente major release, en Opera
12.
Otras aplicaciones
Para todos estos navegadores suele haber complementos de tercero que nos
ayudan en esta tarea, algunos de ellos ya los hemos comentado. Hay algunos que
destacan sobre el resto, como puede ser por ejemplo Ghostery, que es un
complemento que está disponible para todos los navegadores anteriores y nos
ayudará a detectar los sitios web que nos hacen un rastreo y por ende, poder
bloquearlos. Lo podemos descargar
desde su sitio web y también desde los repositorios de las extensiones de
los navegadores.
También hay disponibles otras extensiones que nos ayudarán a detectar las
cookies que no deseemos, para Firefox las más interesantes son TACO
(por sus siglas en ingles Targeted Advertising Cookie Opt-Out) y Better
Privacy.
Otras formas de rastreo
Hasta ahora hemos hablado del tracking que nos pueden hacer de la
forma normal, mediante las cookies. Sin embargo también hay otros métodos para
hacernos un seguimiento en nuestra navegación que son también muy comunes y de
los cuales nos tenemos que defender de formas que muchos ya conocemos.
El malware y los troyanos pueden ayudar a atacantes malintencionados
no sólo obtener información de nuestra navegación sino información privada.
Siempre será recomendable usar un antivirus o programa que detecte si podemos
estamos visitando una página web sospechosa. Otra cosa a tener en cuenta es si
estamos en un sitio publico conectados por WiFi hay herramientas que
permiten a otros usuarios robarnos nuestra sesión literalmente. Ya os
hablamos hace un tiempo de Firesheep, la extensión para Firefox que
permitía esto y BlackSheep, la otra extensión que nos prevenía. Sea como fuere,
siempre que nos conectemos a una red inalámbrica que no conozcamos tenemos que
prevenir y buscar
protegernos de los usuarios que nos busquen las cosquillas.
Como podemos ver con unas herramientas muy simples podemos protegernos de las
cookies que nos rastreen, o al menos hacer su labor más complicada. En cualquier
caso este es un apartado en el que hay que continuar mejorando, esperemos que
los navegadores y también los sitios web hagan más avances en ese sentido con el
objetivo de dotar al usuario de un mayor número de opciones. Aunque en este
último caso hay muchos intereses cruzados y no será fácil que den su brazo a
torcer.
http://bitelia.com/2012/02/como-evitar-ser-rastreado-mientras-navegamos