Una
escabrosa caja de cable podría permitir a Verizon espiar a sus
suscriptores mientras ven TV para ofrecerles anuncios hechos a la medida
y recopilar todo tipo de información valiosa para compañías de
marketing.
Imagina
que estas con tu pareja en el sofá y dejas una película en tu servicio
de cable correr en la TV mientras empiezan a fluir besos y abrazos y
demás –y es que esa es una de las grandes funciones de la películas
vistas en casa–… cuando por alguna interferencia cognitiva te das la
vuelta y una seguidilla de anuncios de vacaciones románticas, condones o
cursos de tantra digital te empiezan a bombardear.
Por
más increíble y perturbador que pueda parecer esta idea, es justo lo
que Verizon, el gigante de las cableras y proveedores de Internet en
Estados Unidos, quiere hacer con un nuevo patente.
Espiar
a los televidentes mientras se acarician, comen McDonald’s, cantan
canciones –¿e incluso cuando se masturban? El sistema de tracking
buscaría productos relacionados con los comportamientos que observa y se
los presentaría a los televidentes en anuncios de TV de una base de
datos.
La
idea va más allá de observar comportamientos, según Verizon se busca la
capacidad de detectar un estado de ánimo –lo cual podrá ser inferido
por una serie de patrones de reconocimiento facial– y así recibir
anuncios para gente feliz o para gente miserable. La empresa también
hace referencia a detectar qué tipo de productos están en tu sala de TV
–en franco espionaje.
La
patente contempla conectarse con smartphones y tabletas, lo cual
incluso podría permitir a Verizon saber que sitios estás visitando o que
actividades realiza en la Red mientras ves un programa de TV, algo muy
útil en cuestiones de marketing.
Muchos
sitios como Facebook y Google ya registran los movimientos que realizan
sus usuarios cuando están fuera de estos sitios a través de códigos de
tracking recopilando información sumamente útil para vender anuncios.
Pero sin duda este patente de Verizon es el más escabroso hasta la
fecha.