La imagen corporal
La imagen corporal hace referencia a lo que ves cuando te miras al espejo y lo que pien La imagen corporal
La imagen corporal hace referencia a lo que ves cuando te miras al espejo y lo que piensas acerca de lo que ves, de tu apariencia personal, así como tus sentimientos acerca de tu cuerpo, incluyendo tu peso, forma del cuerpo, estatura, atractivo físico, etc.
La imagen corporal puede ser positiva o negativa, realista o distorsionada.
Imagen corporal negativa
Cuando una persona tiene una imagen corporal negativa de sí misma suele tener una imagen distorsionada de su cuerpo o partes de él, percibiéndolas de un modo diferente y más negativo a como es en realidad o como lo perciben los demás.
Estas personas suelen dar una gran importancia a su aspecto físico, de manera que si no les gusta su cuerpo (o alguna parte de él) se sienten fracasadas, avergonzadas, piensan que no gustarán a nadie y esperan el rechazo de los demás como consecuencia de su físico. Se sienten incómodas y extrañas dentro de su cuerpo y desearían tener un aspecto diferente.
Por lo general, no suelen tener en cuanta hasta qué punto sus propias expectativas pueden acabar haciéndose realidad debido a su propio rechazo, más que al rechazo de los demás. Por ejemplo, si dos personas fueran exactamente iguales (por ejemplo, gemelas idénticas) pero una de ellas tuviera una buena autoestima y una buena imagen corporal mientras que la otra tuviera una imagen corporal negativa, es muy probable que la persona con imagen corporal positiva fuera menos rechazada por los demás; así mismo, se rodearía de gente psicológicamente más sana y positiva y se vería envuelta en menos experiencias negativas debido a su propia actitud.
Imagen corporal positiva
Las personas con una imagen corporal positiva tienen una percepción más realista de su cuerpo y no consideran que su autoestima o valor personal dependa de su apariencia física. Aunque pueden cuidar su cuerpo, hacer dieta si lo consideran necesario o tratar de mantenerse en forma, aceptan su cuerpo tal como es y no gastan demasiada energía en tratar de cambiarlo o mejorarlo o en preocuparse por el peso, las calorías, o la comida. En general, se sienten a gusto con su cuerpo. Puede que haya partes de su cuerpo que no les gusten especialmente, pero no se paran a pensar mucho en ello y las aceptan a pesar de todo.
Las personas con una imagen corporal negativa tienen más probabilidades de desarrollar trastornos de la alimentación y de padecer problemas de depresión, baja autoestima, soledad o aislamiento social, y obsesiones relacionadas con el peso o la comida.
Por este motivo, es importante tratar de desarrollar una imagen corporal positiva, aceptando nuestro cuerpo tal y como es y sin relacionar nuestro valor como personas con nuestra apariencia física.
El primer paso para desarrollar una buena autoestima y una buena imagen corporal consiste en comportarse como lo haría alguien que las tuviera: ¿de qué personas se rodearía? ¿Qué experiencias viviría? ¿Qué personas sacaría de su vida? ¿Cómo se vestiría? ¿Cómo caminaría o se movería? Un estudio mostró que adoptar una postura física que indique autoestima y confianza durante tan solo dos minutos, hace aumentar nuestra autoestima y confianza realmente. Es decir, tu actitud importa mucho más que tu apariencia.